El euríbor cae en febrero al 1,68% y trae las primeras rebajas en las hipotecas

Representa muy poco dinero, pero no es menos cierto que se trata de la primera y casi única alegría que ayer ofreció el ámbito económico a los ciudadanos. Por fin, el euríbor baja lo suficiente para que quienes tienen contratada una hipoteca con revisión anual se beneficien de un pequeño respiro en sus letras. Algo que no sucedía desde agosto del 2010.

El beneficio es mínimo, pero abre la puerta a ahorros crecientes si las cosas no cambian demasiado. En plena cuesta abajo hacia la recesión, con más de 5,2 millones de parados, con el crédito financiero seco y en medio de un complicado marco laboral, la referencia más utilizada en España para fijar el coste de los créditos para la compra de vivienda cierra febrero en el entorno del 1,68%. El valor real de la cifra es que supone un poco menos que hace un año, cuando se situaba en el 1,714%.

Es esa tendencia secreciente la señal más importante. El euríbor lleva cuatro meses de caída continuada, y la política del Banco Central Europeo (BCE), que en otro momento tendría la vista puesta únicamente en la inflación, se aparta de la ortodoxia que se le supone. De hecho, el organismo presidido por Mario Drahgi está dedicado a inyectar cantidades ingentes de dinero en el mercado financiero a un precio barato (1%). Ahí está parte de la explicación de la caída del euríbor, que no deja de ser el tipo de interés al que los bancos que se prestan el dinero entre sí a un plazo de un año.

Si se toma en cuenta una hipoteca de 120.000 euros a 25 años de plazo y un coste financiero de euribor más 0,75%, las letras mensuales pasarían de costar (respecto a febrero del 2011) 536,17 euros a suponer 534,4 euros. Esto es, la rebaja de quienes tengan este tipo de revisión contractual será de 21 euros al año. Será mayor para los que firmaron un contrato con revisión semestral.