Diario de León

El sector turístico en España se muestra más fuerte que nunca

Una actividad que se ha convertido en el principal motor de la economía en nuestro país.

Miles de personas en la playa de Salou, en Tarragona. JAUME SELLART

Miles de personas en la playa de Salou, en Tarragona. JAUME SELLART

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colpisa | d. valera

En pleno mes de julio España está inmersa en la temporada alta para el turismo. En los meses de verano el país concentra casi el 40% de todas las llegadas de viajeros extranjeros del año, lo que supone una cifra muy elevada. Así, en el tercer trimestre del año pasado fueron 27,4 millones y todo hace indicar que este curso se superará con creces ese guarismo con vistas a superar el récord de 75,3 millones a final del año. Un dato más para un sector que, lejos de tocar techo, se encuentra más fuerte que nunca. De hecho, ha pulverizado los niveles de empleo, gasto turístico y llegadas previo a la crisis. Una fortaleza que también se deja sentir en las previsiones positivas de los empresarios. De hecho, un 58% de ellos aumentaron los precios en el segundo trimestre del año y un 62% esperan mejorar su ventas en el periodo julio-septiembre. Todo este cóctel ha convertido al sector en uno de los grandes motores de la economía no sólo en época de bonanza, sino en los momentos de más debilidad de la economía.

El Gobierno prevé que el PIB crezca este año un 3%, aunque algunos centros de estudio elevan ese avance al 3,3%. El turismo lo hará todavía más rápido hasta un 4,1%, según la estimación de la patronal del sector Exceltur. Este incremento superior al de la economía se repite en los últimos años y ha permitido que el peso del sector se haya incrementado sin notar en demasía la crisis. Es más, el turismo fue el sostén de la economía en los años de recesión junto con el sector exterior. De hecho, ha pasado de representar el 10,4% del PIB a superar el 11% en 2015 (último dato disponible), según el INE. Pero la variable más espectacular para medir el impulso que ha registrado el sector está en la llegada de turistas extranjeros. Antes de la crisis, cuando España ya era un país puntero a nivel mundial en este ámbito, recibió 58,7 millones de viajeros. El número descendió a los 52 millones en 2009 y 2010 por el impacto de las debilidades económicas en los principales mercados de origen de los visitantes, principalmente europeos. Sin embargo, a partir de 2011 comenzó una tendencia alcista que no se interrumpió a pesar de las turbulencias que golpearon a la zona euro (los rescates a Grecia, Portugal e Irlanda) y España (rescate bancario). Así, en 2016 el número de turistas internacionales superó en un 22% el número de llegadas previo a la crisis. Este incremento acelerado de la llegada de extranjeros se debe a varios factores externos que han coincidido para crear este escenario.

Por una parte, España tiene un notable número de ‘turistas prestados’ por la inestabilidad del norte de Africa o de Turquía. Desde la patronal Exceltur consideran que los problemas de esos destinos han desviado hacia España a 12 millones de vajeros desde el comienzo de las ‘primaveras árabes’ en 2011. Además, la depreciación del euro debido a la política expansiva del BCE ha contribuido a impulsar nuevos mercados al margen de los tradicionales británico, alemán y francés que además tienen un mayor poder adquisitivo. Es el caso de los suizos o estadounidenses, que el año pasado aumentaron un 8,5% y un 7,2%, respectivamente. Diversificar ofertas Precisamente, la diversificación es uno de los objetivos del Gobierno, que trabaja para mejorar la conectividad con algunas regiones como China, Japón o Corea como reclama el sector. . Asimismo, la estrategia para el futuro también pasa por incrementar la variedad de la oferta más allá del sol y playa o el rural, con el turismo de compras y de salud como dos mercados con más posibilidades. El objetivo final es aumentar el gasto turístico. Una variable que en 2016 alcanzó los 77.000 millones, lo que supone 27.000 millones más que la registrada antes de la crisis. Sin embargo, el gasto medio por turista lleva retrocediendo desde 2011.

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