El euríbor completa su mayor descenso en 12 años tras caer al 2,4%

Los hogares hipotecados a tipo variable van a culminar 12 meses en los que poco a poco han visto cómo sus cuotas mensuales han ido descendiendo a lo largo de 2024 gracias a un descenso del euríbor que ha cerrado el año en el entorno del 2,43%. Este nivel es claramente inferior al que registraba este mismo índice cuando cerró el ejercicio en una cota cercana al 3,67%. Su bajada respecto al mismo mes del año pasado (1,25 puntos porcentuales) es la mayor de un mes de diciembre desde 2012.

En estos meses, el euríbor ha caído más de un punto porcentual, una evolución que no registraba desde el peor momento en el que la crisis de la burbuja inmobiliaria comenzó a dar sus primeros síntomas, allá por el verano de 2008. Entonces pasó del 5,4% al 1,4% en cuestión de unos pocos meses. Aunque en aquella ocasión fue como consecuencia de una grave recesión que se llevó por delante buena parte de la economía.

La caída del euríbor experimentada durante este año ha abaratado las hipotecas una media de unos 1.500 euros al año, calculados para un préstamo inmobiliario medio de unos 150.000 euros a 24 años con un diferencial de un punto sobre el euríbor. Esto es, unos 125 euros al mes. Hasta poco después del verano, los descensos del euríbor no habían sido tan perceptibles para los hipotecados como el que se ha dibujado este último trimestre. De hecho, las estimaciones de las distintas casas de análisis auguraban que el euríbor bajaría al nivel del 2,5% durante la primera parte de 2025, y nunca antes de final de año. Sin embargo, los acontecimientos han impulsado las rebajas: la victoria de Donald Trump en Estados Unidos, con los amagos de aranceles, un mayor debilitamiento europeo y la necesidad de que el Banco Central Europeo (BCE) apunte a una rebaja de tipos más dinámica de lo que se esperaba hasta ahora. El 12 de diciembre, el BCE acometió una nueva rabaja del precio oficial del dinero hasta el 3%.

«El proceso desinflacionario está encarrilado», advirtió la presidenta del Banco Central Europeo (BCE), Christine Lagarde. En la que su última reunión del año, el Consejo Gobernador ha decidido del BCE ha decidido seguir reduciendo el precio del dinero, alentado por los buenos datos de la inflación, y con el objetivo de impulsar la actividad económica, que se situará en el 0,8% en 2024, según las previsiones de la Comisión Europea.