SuperMario, el refugiado: el juego de la crisis humanitaria

Un diseñador gráfico sirio ha creado una parodia del clásico juego Super Mario en la que el protagonista se convierte en un refugiado sirio que debe enfrentarse a varias adversidades para lograr llegar a Europa.

En esta versión no oficial el personaje debe recoger dinero, lidiar con traficantes de personas, saltar vallas y atravesar el mar al más puro estilo de Nintendo, para alcanzar la bandera de la Unión Europea en el último de los niveles.

Esta es la manera con la que el joven sirio Samir Al-Mufti (seudónimo que usa por seguridad), de 29 años, explica la difícil travesía por la que ha pasado él y varios de sus conocidos intentando huir de su país aunque, por desgracia, la realidad supere a la ficción.

TRIBUTO A UN AMIGO

Al-Mufti, diseñador de profesión y actualmente aficando en Estambul, concibió el juego tras perder, cinco meses atrás, a su mejor amigo que se ahogó intentando llegar a la costa griega desde Turquía.

"El motor del barco en el que viajaba explotó", cuenta y añade que eligió Super Mario para denunciar los peligros a los que se enfrentan sus compatriotas ya que "todo el mundo lo conoce y a la música del juego también. En conjunto es como si fuera un lenguaje universal. Es simple y claro como la idea que quiero transmitir".

EN 30 ANIVERSARIO DE MARIO

El domingo, mientras el famoso fontanero celebraba su 30 cumpleaños, su alter ego sirio se viralizaba gracias a un vídeo que subió Online For Media Production que muestra la trama de la adaptación.

La página es conocida por elaborar y publicar contentidos satíricos que denuncian la situación política de Siria y ha colaborado con Al-Mufti para crear esta versión controvertida del juego.

El personaje tiene una voz muy parecida a la de Bashar el Asad, como burla al presidente sirio y problablemente sea la misma que se Media Production utiliza para parodiar sus discursos en su canal de Youtube.

UNA VISIÓN MENOS DURA DE LA REALIDAD

"Quiero pensar que todo por lo que tiene que pasar un refugiado es como un juego", explicó Al-Mufti al Huffington Post. "El protagonista debe susperar varios desafíos hasta llegar al país de asilo, como en la vida real".

El diseñador gráfico explicó que esta iniciativa no se tiene que tomar como una burla sino que espera que sirva para "aliviar a sus compatriotas" y a portar una visión diferente de la crisis migratoria.

Al-Mufti no esperaba la gran repercusión que su iniciativa ha tenido pero espera que sirva para mostrar la realidad de los refugiados y concienciar a la población europea.