CRISIS EN VENEZUELA
Venezuela planta cara a Maduro con Corina Machado a la cabeza: ¡Venezuela será libre!
La comitiva de la líder opositora ha sido "violentamente interceptada tras unirse a los manifestantes en la que ha sido su primera aparición pública en cuatro meses
La líder opositora de Venezuela, María Corina Machado, ha sido arrestada este jueves, según ha informado el canal de televisión local VPI TV citando al miembro del personal de la oposición Magalli Meda. Machado fue "violentamente interceptada" por la Policía chavista al salir de la movilización popular a la que se había sumado, en su primera aparición pública en meses.
La disidente ha reaparecido después de 133 días en la clandestinidad para participar en una de las concentraciones de protesta que se celebran en Caracas contra la proclamación presidencial de Nicolás Maduro.
En vísperas de esta ceremonia, la disidente ha cumplido su promesa a los manifestantes y les ha arengado desde Chacao, el distrito financiero de la capital que se había anunciado como uno de los puntos de convocatoria. Ha animado a los participantes a conquistar la "libertad" y repetido el lema 'Gloria al pueblo bravo', que han coreado cientos de personas.
La propia Corina ha publicado un vídeo en sus redes sociales donde se la ve subida en una tarima mientras se dirige a los concentrados. Poco antes había difundido otra grabación en la que repetía las mismas proclamas y avisaba: "Nos vemos en unos minutos". La líder opositora reta así al Gobierno chavista, cuyo ministro del Interior, Diosdado Cabello, ha repetido insistentemente que sería detenida en cuanto pisara de nuevo las calles. Al parecer, la protege un amplio cordón de seguridad para asegurar su huida.
"Lo dijimos, hoy nos encontrábamos en todas las calles de Venezuela y en el mundo. Yo estoy aquí, contigo, y hasta el final", ha señalado al dirigirse a sus simpatizantes, a los que puso en valor por saber articularse contra el régimen de Maduro a pesar de los impedimentos del chavismo. "Los superamos el 28 de julio", ha celebrado la líder disidente, que ha advertido al oficialismo de que "hagan lo que hagan" el viernes será su "sentencia final".
Numerosas movilizaciones
Mientras esto sucedía en Chacao, las movilizaciones se multiplican en otras áreas de Caracas y en algunas de ellas se han producido enfrentamientos con la Policía y la nueva milicia civil, que han practicado algunas detenciones. Los policías y los militares estaban equipados con material antidisturbios y han disparado gases lacrimógenos contra los concentrados. Al mismo tiempo, ha comenzado la voluminosa contramanifestación impulsada por el movimiento afín al chavismo en defensa de Maduro.
Los opositores al régimen chavista han salido a las calles de Caracas en busca de una movilización "histórica" contra Nicolás Maduro en la víspera de su investidura como presidente de Venezuela. Enfrente hay un imponente despliegue de militares y policías, unificados desde hace unas horas en un único cuerpo de defensa nacional que incluye a civiles armados. Éstos también se hacen notar. Hay una fuerte presencia de individuos encapuchados y de motoristas, muchos de los cuales participaron seguramente este miércoles en una multitudinaria caravana de enaltecimiento del líder en compañía de otros dirigentes como la vicepresidenta Delcy Rodríguez.
Entre los congregados se escuchan gritos de "Justicia" y "Gloria al bravo pueblo". La impresión es que el chavismo quiere torpedear las concentraciones para minimizar su impacto a unas horas de estrenar su nuevo Gobierno, e incluso de medir el tamaño de las marchas. La oposición ha difundido varios puntos de concentración en la capital.
En tres de ellos, La Vega, Chacao y el exterior del centro comercial Líder, el régimen ha instalado pequeños escenarios, posiblemente para trasladar allí a sus propios oradores en la llamada Gran Marcha por la Paz y la Alegría, la movilización con la que pretende contraprogramar a los opositores. Las tarimas están custodiadas por soldados y miembros del nuevo Cuerpo Combatiente, que este jueves se estrena como fuerza bajo el mando del ministro de Defensa y del presidente. Lo conforman empleados de 31 instituciones del Estado, a los que se están agregando ciudadanos afines al oficialismo. El Ejecutivo les ha entregado fusiles y rifles de asalto.
"Esto es parte de lo que siempre ha hecho el Gobierno, que es amedrentar a la población para que no salga. Eso todo el mundo lo sabe, pero ellos están tranquilos allí y nosotros estamos tranquilos aquí, nadie molesta a nadie, porque no estamos haciendo nada ilegal", dice uno de los manifestantes. Como el resto, todos esperaban la llegada de la líder disidente, María Corina Machado, que había anunciado su participación en la manifestación a lo largo de la tarde.
El candidato Edmundo González Urrutia se encuentra, mientras tanto, en Santo Domingo, donde ha aterrizado hace escasas horas como punto final a su gira en busca de apoyos internacionales. El líder opositor venezolano ha expresado en esta jornada de protesta su apoyo al pueblo de Venezuela y a Machado, que anunció esta semana que saldría de la clandestinidad para asistir a esa manifestación.
El movimiento chavista se ha esforzado para tratar de frenar la movilización de la oposición. Aparte de la marcha caraqueña, en los Estados de Bolívar, Monagas, Sucre y Zulia también ha preparado actos con nombres igualmente singulares como la Gran Marcha Antiimperialista Yo Juro con Maduro, la Gran Marcha Patriótica contra el Fascismo o Motorizados por la Paz. Su conclusión coincidrá con un ceremonial donde juren la Milicia Nacional Bolivariana y el Cuerpo de combatientes, un batallón civil surgido del "pueblo" para luchar contra quienes "amenazan la seguridad de Venezuela".
El líder chavista ordenó el miércoles (madrugada de jueves en España) activar los Órganos de Dirección para la Defensa Integral (ODDI), un nuevo y poderoso sistema de seguridad nacional que aglutina a la Policía, la Fuerza Armada Bolivariana y a las citadas milicias en un único cuerpo. Maduro firmó el decreto e instó a esta fuerza a multiplicar las patrullas durante esta jornada de movilización de los opositores.
Nueva oleada de represión
Las nuevas disposiciones de defensa y el blindaje de seguridad de los últimos días no parecen buen síntoma. Según la oposición, todo apunta a que podría producirse una nueva ola de represión, semejante a la registrada durante las movilizaciones de noviembre, posteriores a la designación de Maduro como presidente en las pasadas elecciones, que conllevaron la detención de más de 2.000 personas.
El presidente explicó que la nueva ODDI rompe con "el viejo concepto de seguridad de la nación de los manuales gringos de la misión militar norteamericana de West Point. Ahora es el concepto construido por los constituyentes del año 1999, del pensamiento bolivariano del comandante Hugo Chávez". Así, además de unificar a la Policía y los militares, este nuevo órgano incluye "al pueblo"; es decir, a civiles afines que dispondrán de sus propias armas encuadrados en lo que el régimen ha denominado Cuerpo Combatiente.
Esta misma semana, Maduro ha entregado el armamento a un numeroso grupo de empleados públicos de 31 instituciones del Estado. Y no son equipos cualquiera, Se trata de fusiles de asalto de fabricación alemana MPi-KMS-72 y MPi-KM-72 y rifles Mosin Nagant 91/30. Las ODDI, cuyo fin es "salvaguardar la soberanía nacional", tendrán una presencia muy notoria en la vida civil venezolana. El decreto aprobado esta pasada madrugada establece su distribución en diferentes escalas para cubrir todo el territorio. Hay 335 municipales, 1.141 organizaciones de caracter "parroquial" y más de 5.000 comunales.