Londres desliga la petición de traslado de tropas de los comicios norteamericanos

El ministro de Defensa británico, Geoff Hoon, confirmó ayer que Washington había cursado una petición al Ejecutivo de Londres para desplegar tropas británicas en zonas conflictivas de Irak, como el triángulo suní alrededor de Bagdad o Faluya, bajo mando norteamericano. Hoon añadió en la Cámara de los Comunes que aún no se había adoptado ninguna decisión, pero que ésta llegará a mediados de esta semana. El ministro británico tam-bién indicó que la petición no llegaba con un componente político, sino que se trataba de «una obligación de responder a la petición de un país aliado». Periódicos como The Guardian indicaron ayer que la solicitud de George W. Bush ya había sido aceptada por Blair y que respondía al deseo del presidente norteamericano de potenciar su campaña electoral con un mayor compromiso militar de su aliado británico. «Queremos dejar bien claro que la petición de Washington (cursada el 10 de octubre) es una solicitud militar y aunque está vinculada a unas elecciones, las iraquíes que tendrán lugar en enero, no está relacionada con las norteamericanas», informó Hoon en Westminster. Esos soldados, que ocupan una posición de reservistas para el contingente británico en Irak, que ordena el sudeste del país, se tendrán que desplazar a un entorno más hostil y coordinarse con el mando de las tropas de Estados Unidos. Serán, pues, mucho más vulnerables a los ataques de los rebeldes iraquíes. Críticas polacas Un alto responsable del Mi-nisterio de Defensa polaco criticó a Estados Unidos al estimar que no ha suministrado suficiente ayuda militar a las fuerzas polacas en Irak, formadas por 2.500 hombres. El viceministro de Defensa, Janusz Zemke, declaró en The Herald Tribune que su país, quinta fuerza militar en Irak, no ha podido por ello financiar la modernización de sus fuerzas armadas. Por su parte, el primer mi-nistro polaco, Marek Belka, confirmó ayer que Varsovia reducirá progresivamente su presencia en el país árabe a partir de enero del 2005 y que sus soldados no permanecerán en él «ni una hora más de lo que dicte la razón».