Diario de León

Su anterior partido, el Likud, deja de ser la primera formación nacionalista a favor de Beitenu

Olmert y su plan de fronteras para Israel vencen en las urnas pero pierde terreno

La participación en unas elecciones cruciales es la más baja de la historia

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Eugenio García Gascón - jerusalén
León

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Si se cumplen finalmente lo qure vaticinan los últimos sondeos, la victoria del Kadima, el partido del primer ministro en funciones Ehud Olmert, sale victorioso de las elecciones en Israel aunque pierde terreno frente a su adversarios políticos. Al cierre de esta edición, Olmert se quedaría por debajo de los 40 escaños que el propio partido esperaba obtener. Mientras, la escasa diferencia que separa a laboristas y Likud hace augurar que los pactos jugarán un papel decisivo a la hora de configurar el futuro gobierno. Además, se da una novedad importante, y es que, según el Canal 2 de la televisión israelí, Israel Beitenu, que hasta ahora contaba con tres escaños, sobrepasa al Likud en número de diputados y le desplaza como primera fuerza nacionalista por primera vez en la historia del país. La participación en estas elecciones legislativas es la más baja de la historia de Israel. El motivo: la situación especialmente compleja que atraviesa Israel. El anterior primer ministro electo, Ariel Sharón, fundador de Kadima, permanece en coma (y sin indicios de recuperación), ningún gobierno se declara dispuesto a retomar las negociaciones de paz con los palestinos tras la victoria de Hamás (a menos que el grupo renuncie al terrorismo) y el jefe del Gobierno en funciones ha puesto sobre la mesa la propuesta de fijar en cuatro años las fronteras definitivas de Israel, retirándose de parte de Cisjordania. La composición del futuro gobierno será clave para este proyecto. Si se cumplen los pronósticos y se mantienen los resultados de los primeros escrutinios, todo estará en manos de Olmert, el político que fue un excelente número dos de Sharón y que deberá tomar las riendas del país. Demostró tener buen temple y aptitud para aconsejar y apoyar al anterior primer ministro en los momentos difíciles pero a partir de ahora, como número uno, se enfrenta a su falta de carisma. A ello se une los disgustos que le da su familia, que no le ha votado. Está casado y tiene cuatro hijos biológicos y una hija adoptada. Una de sus hijas es lesbiana y vive en Tel Aviv con su compañera, otra es una pacifista consumada, y sus dos hijos viven en el extranjero y se han negado a enrolarse en el ejército. Nuevo Gobierno de Hamás El Gobierno del movimiento radical de resistencia islámica Hamás, que tendrá como primer ministro a Ismail Haniyeh, fue investido ayer por el Consejo Legislativo Palestino (Parlamento) y comenzará su andadura pese a las reticencias de la comunidad internacional. Al final, 71 diputados votaron a favor del Gobierno, 36 en contra y dos se abstuvieron en esta sesión de investidura extraordinaria que se prorrogó durante dos días debido al gran número de parlamentarios que quería hacer uso de la palabra. Ocho de los diputados de Hamas están detenidos en cárceles israelíes y no asistieron a la sesión de investidura ni pudieron votar. Todos los diputados presentes de Al Fatah (45) votaron en contra del nuevo gobierno. La sesión se llevó a cabo en la sede del Parlamento, en Ramala, y los diputados de la Franja de Gaza, entre ellos Haniyeh, asistieron a ella por videoconferencia debido a las restricciones de movimiento impuestas por Israel.

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