El Gobierno de Sudán acepta que la ONU tome el control de Darfur

El Gobierno sudanés no descarta el despliegue de una fuerza de la ONU en Darfur para reemplazar a los soldados de la Unión Africana (UA), en un claro cambio de posición tras la firma del acuerdo de paz con el principal grupo rebelde. Ayer, el secretario general adjunto de las Naciones Unidas, Jan Ege-land, llegó a Darfur en lo que se convirtió en la primera visita de un responsable de la ONU tras la firma del acuerdo en Abuja el pasado viernes. «El gobierno evaluará si tiene necesidad o no de la asistencia de fuerzas extranjeras y podría decidir el pedido de un despliegue (de una fuerza) de la ONU», dijo el portavoz del ministro de Relaciones Exteriores, Jamal Ibrahim. «Una decisión así es facultad del gobierno (...) no habrá despliegue de fuerzas extranjeras en Sudán sin el consentimiento previo del gobierno», añadió. Estas declaraciones marcan un nítido cambio de posición de parte de Jartum, que se oponía al envío de fuerzas no africanas a Darfur para reemplazar a las tropas de la UA. A finales de febrero, el presidente sudanés, Omar al-Bechir, incluso había advertido que Darfur sería un «cementerio» para las tropas extranjeras que fueran enviadas sin el acuerdo del gobierno. Pero, en los últimos días, funcionarios sudaneses se refirieron a la posibilidad de un despliegue de fuerzas de la ONU en el marco de un acuerdo de paz. Se trata de «una señal muy alentadora, del primer resultado positivo del acuerdo de paz de Abuja», consideró el representante estadounidense ante la ONU, John Bolton. Incluso antes de la firma del acuerdo, el gobernador de Darfur-norte, Osman Yusef Kibir, había dicho que el gobierno podría aceptar que una fuerza de las Naciones Unidas supervisase un acuerdo de paz. «Pensamos que el despliegue de una fuerza de la ONU en Darfur, tras la conclusión de un acuerdo de paz, puede servir de garantía a su aplicación», según declaró Kibir la semana pasada. Mensaje de Bin Laden En un mensaje de audio atribuido a Osama bin Laden, el jefe de Al Qaida llamaba a una guerra santa en Darfur después de que Estados Unidos se mostrara favorable a una fuerza de la ONU en la región con apoyo de la Otan. El gobierno sudanés y la facción mayoritaria del principal grupo rebelde de Darfur, el Movimiento/Ejército de Liberación de Sudán (SLM), firmaron el viernes en Abuja un acuerdo de paz para poner fin a la guerra civil que ha devastado esta provincia del oeste de Sudán durante tres años. En cambio, los rebeldes del Movimiento por la Justicia y la Igualdad (JEM), rechazaron el acuerdo, al igual que una facción minoritaria del SLM dirigida por Abdel Wahid Mohamed al-Nur. Los grupos rebeldes, descendientes de tribus africanas mayoritarias en Darfur, se levantaron en armas para protestar por la marginación de esa provincia. La guerra civil en esta región del oeste de Sudán ha dejado unos 300.000 muertos y 2,4 millones de desplazados en tres años.