Los vecinos recogen sus pertenencias del edificio de Fernández Ladreda
?. Los electricistas comienzan la reparación del cuadro de contadores y colocarán más potencia a la instalación.
La puerta de acceso al edificio sigue precintada.
Varios electricistas empezaron a trabajar ayer en el cuadro de contadores del edificio de Fernández Ladreda. Una de las primeras actuaciones ha sido la de evaluar el alcance del siniestro. Los técnicos sustituirán el cableado y darán más potencia a la instalación, que data de hace cuarenta años.
La vivienda sufrió la madrugada del pasado sábado un cortocircuito que obligó a desalojar a los 26 inquilinos que en ese momento dormían en sus casas. Los propietarios de edificio, técnicos y policía local permanecieron ayer toda la mañana en el inmueble. Algunos inquilinos aprovecharon ayer para pasar a recoger parte de sus enseres, previa autorización de la policía local y con supervisión. Durante la mañana cargaron los coches con bolsas con ropa y otros objetos y agradecieron la colaboración municipal y de la propiedad.
Reunión en el Ayuntamiento . Los técnicos y propietarios del edificio mantendrán hoy una reunión con los responsables municipales para evaluar el alcance de la obra y decidir el futuro realojo de los vecinos. Los que tienen familia permanecen alojadas en sus casas. Otras 17 personas, todos inmigrantes, están alojados en la casa para transeúntes de la sociedad San Vicente de Paúl y el albergue municipal. El Ayuntamiento se ha hecho cargo del realojo de los inquilinos que no tienen otro sitio donde ir, pero reclama a la propietaria del inmueble que se haga cargo de los gastos que supone su mantenimiento, pero la póliza de seguros del inmueble no cubre los gastos del realojo. En la reunión de hoy se decidirá el futuro de las personas que, de momento, permanecen en estos recursos sociales que no están pensados para albergar a personas que se encuentran en esta situación.
El Ayuntamiento, a petición de la dirección de la casa de la sociedad San Vicente de Paúl, se ha hecho cargo también del cuidado de los dos bebés marroquíes que permanecen con sus madres en este domicilio y ayer acudieron a una guardería municipal para que las familias afectadas tengan tiempo para agilizar los papeles que requiere una situación como ésta.
El edificio siniestrado permanecerá aún varios días clausurado.