El Gobierno se escuda en la crisis para aparcar la reforma del San Marcos
Soria anuncia que tampoco se hará el parador de Villablino y desvela un déficit de 100 millones en la sociedad.
Recreación virtual de cómo quedaría el Parador San Marcos después de la profunda reforma proyectada.
El pasado otoño, Paradores ya anunció su retraso. Ahora el Gobierno confirma que la reforma de San Marcos no se hará, al menos en estos tiempos de crisis. Las obras de remodelación del hotel más emblemático de la cadena, junto con el Reyes Católicos de Santiago de Compostela, iban a contar con un presupuesto de 40 millones de euros y podrían suponer el cierre del establecimiento durante meses. León es uno de los paradores más rentables de la cadena pública.
El otro gran proyecto de la sociedad pública para la provincia, el parador de Villablino, prometido en 2004 por el PSOE leonés pero que seguía como proyecto ocho años después, se aparca definitivamente por el nuevo Gobierno.
El ministro de Industria, Energía y Turismo, José Manuel Soria, anunció ayer que no se van a acometer nuevas construcciones de Paradores, dado que no es aconsejable realizarlas desde el entorno presupuestario actual, entre ellos el proyecto de Villablino, aplazado hasta que la situación mejore, según informa la agencia Efe. Soria, que intervino ayer en el ciclo de Conferencias de Intereconomía, señaló que el déficit de tesorería que tiene la sociedad Paradores del Estado ronda los 100 millones de euros y, aunque se trata de «un emblema» y un producto «potente», no se está en condiciones de acometer nuevos paradores. Lo que sí garantizó el ministro es que sí se van a realizar tareas de mantenimiento y mejoras de gestión, así como obras puntuales, como las que se están desarrollando en el establecimiento de Lorca.
La decisión de suspender los proyectos va a ser trasladada al Consejo de Administración de la cadena estatal en la reunión que tiene prevista para finales de marzo y en la que la presidenta, Gela Alarcó, expondrá los nuevos planes de futuro basados, según han indicado fuentes del sector a Efe, en un fuerte ajuste.
Para el 2012 estaba previsto abrir los establecimientos de Lorca y el remozado parador de Cádiz, este último aprovechando el 200 aniversario de la promulgación de la Constitución de Cádiz de 1812, actuaciones que se mantienen. Otros paradores cuyas obras se tenía previsto abordar en los próximos dos años, como eran los de Corias (Asturias), Ibiza, Morella (Castellón), Muxía (Coruña), Veruela (Zaragoza) y Béjar, también han quedado aplazados hasta que la situación económica mejore.
Además de los dos proyectos en la Comunidad, también han quedado apartados los proyectos de paradores en Alcalá la Real (Jaén), Badajoz, Estella (Navarra), Lérida y Molina de Aragón (Guadalajara).
La sociedad pública de Paradores, que en la última etapa socialista estuvo dirigida por Miguel Martínez, cerró el 2011 con una facturación de 252 millones de euros, un 1% menos.