Diario de León

Jesús Pérez

«miro los baños y, si me gustan, me quedo»

c.

Jesús Pérez, orgulloso de su nueva caravana.

Jesús Pérez, orgulloso de su nueva caravana.

Publicado por
León

Creado:

Actualizado:

Las marcas de la camiseta de tirantes blanca, el sombrero de paja y la piel rojo cangrejo parecen las características de un guiri, pero hay un personaje ciertamente ibérico que cumple estos requisitos: el campista. Jesús Pérez, que lleva siendo campista desde siempre y a sus 66 años sigue queriendo serlo, ha dejado la tienda de campaña y ahora viaja con una modesta caravana que comparte con su mujer y sus nietos. Esta vez su destino ha sido Villamañán.

—¿Qué tiene el cámping que no le ofrezca un hotelazo?

—El aire aire libre y estar en plena naturaleza. Nos da igual que sea verano o invierno, mi mujer y yo acampamos todo el año. Ahora que nos vamos haciendo mayores estamos con la caravana, que tienes muchas más comodidades que una tienda de campaña.

—Pero ¿en invierno también abren los cámpings?

—Por supuesto. Además nosotros tenemos un amigo con un cámping en Puerto de Vega (Asturias), al que vamos todos los fines de semanas de invierno.

—¿Cuál ha sido el mejor en el que ha estado en su vida?

—Uno al lado de Elche, precioso. Todo un lujo, unos servicios limpísimos y una piscina enorme.

—¿Y por aquí en León no hay ningún buen cámping?

—Son campamentos de verano, están bien, pero no son maravillosos. Los cámpings asturianos, con ese verde, sí que son bonitos y buenos.

—Pero aún así vuelven a León todos los años, ¿verdad?

—Es verdad que volvemos, además pasamos la mayor parte del verano en el cámping de Villadangos del Páramo.

—¿Qué es lo que tiene que tener un cámping para que sea de su gusto?

—Las limpieza de los baños, que vamos con los nietos y eso es muy importante. Que no pillen nada raro.

—¿Y qué es lo primero que hace para decidir si se queda o se va?

—Me bajo, miro los baños y miro si tenemos una buena parcela para acampar.

—¿Tan importante es esto de «tener tierras» en el mundo del campismo?

—Mucho, sobre todo si llevas a los guajes pequeños contigo. Que los jefes de los cámpings son muy despotas y se quejan por todo.

—Tiene pinta usted de pasar mucho tiempo fuera de casa, ¿verdad?

—Todo el que podemos. Estamos el tiempo justo en Luarca (Asturias), de donde somos. Al final nuestra casa es el cámping.

—Con usted se cumplen dos tópicos del verano leonés: asturiano y campista coyantino.

—Y orgulloso de cumplirlos (se ríe). Y los seguiré cumpliendo muchos más años.

—Pero al final, ¿qué es lo que más valora del campismo?

—La amistad y la gente que conoces en estos lugares.

PAblo Guerra nicolás

leonalsol@diariodeleon.es

tracking