Los afines a Rodríguez dinamitan desde dentro la unidad del PSOE local

A los críticos con el PSOE provincial y oficiales en el local les nació ayer una facción crítica en su propio seno. Un grupo de 83 militantes —promovido por la facción al secretario provincial, Tino Rodríguez— que dinamitó la asamblea de la agrupación local socialista con un comunicado en el que exigen al líder municipal, José Antonio Diez que «tenga como objetivo fundamental ejercer una oposición sería y férrea, así como abandonar las batallas internas que nada aportan a la militancia». Un escrito articulado por los procuradores autonómicos Miguel Ángel Fernández Cardo y Teresa Gutiérrez, los concejales del Ayuntamiento Natalia Rodríguez Picallo, María Rodríguez, Catalina Díaz, María José García y Agustín Pérez Lamo, el secretario de Juventudes Socialistas, Héctor Carrera, o el ex diputado nacional Diego Moreno. Los herederos del estandarte de la etapa de liderazgo de Francisco Fernández, que quedaron descabalgados del nuevo organigrama de poder tras el último congreso local.

El comunicado quedó sobre el atril sin que pudiera leerlo Belén Castañón. La militante que Rodríguez ha escogido para participar en la conferencia nacional y que ocupe el puesto que había reclamado Diez con el apoyo de la agrupación local. «Mujer, feminista y socialista», alcanzó a decir la integrante de la ejecutiva provincial, antes de que enfilara el discurso y fuera censurada por la mesa. El gesto que hizo que abandonara la sala, acompañada por una decena de personas.

Pero el gesto para dinamitar la unidad de acción ya había hecho con el envío del comunicado a los medios, titulado «Por un proyecto socialista para la ciudad de León». «Queremos un PSOE en la ciudad de León que dedique las 24 horas del día a estar al lado de la gente, a escuchar sus demandas y a poner en marcha iniciativas que puedan dar respuesta a los problemas de los más de 130.000 leoneses y leonesas que luchan diariamente en la ciudad para poder salir adelante», apuntaron en el documento. Un manifiesto trufado de referencias indirectas a Diez, sin citarle en ninguna línea, por la necesidad de «convocar asambleas para debatir», de que «cada hombre y cada mujer que siente las siglas no sea ni menos ni más que ningún otro compañero» o de que «refuerce con iniciativas las siglas del PSOE local de León y no que las desgaste con batallas internas que nada aportan a la militancia, y que alejan de nosotros a la gente que verdaderamente nos necesita».

Que empiecen a trabajar

El golpe que el propio Diez analizó una vez terminada la asamblea. «Acepto las críticas, pero desconocen cuál es el funcionamiento que estamos siguiendo», apuntó el secretario local del PSOE y portavoz en el Ayuntamiento, quien concedió que «hay gente que ya ha dicho que no sabía que firmaba eso, sino que le dijeron que era contra el PP», y apuntó que «trasluce que hay otros intereses promovidos por Rodríguez».

Una defensa desde la que aprovechó para pasar factura a los compañeros del grupo que se posicionaron en contra. «Me sorprende que haya cargos públicos entre los firmantes, sobre todo concejales. Esperamos que se incorporen al trabajo para reivindicar todas esas cosas que los demás ya estamos haciendo», animó, en referencia a Picallo, Rodríguez, Díaz, García y Pérez Lamo, que vuelven a evidenciar la ruptura irreconciliable entre los deudos de la etapa de Fernández y los que se alejaron antes de la caída del líder.