En el 2023, la mitad de los leoneses tendrán más de 65 años
León perderá 35.517 personas más en la próxima década, según alerta el INE.
Menos y más viejos. Los dos parámetros que resumen la proyección de la población de la provincia leonesa para la próxima década planteada por el Instituto Nacional de Estadística (INE). El trabajo, basado en el mantenimiento de las tendencias y los comportamientos demográficos actualmente observados, que asienta que en León perderá 35.517 habitantes de una década, que nacerán 762 niños menos y que el crecimiento vegetativo tendrá un saldo negativo de 3.365 personas.
Los factores con los que se definirá una pirámide poblacional con la base cada vez más estrecha, donde se apuntarán 50.625 jóvenes de entre 0 y 15 años, lo que supone 6.124 por debajo de los actuales; una parte intermedia, confirmada por la población activa de entre 16 y 65 años, mermada por las migraciones y las muertes, que restarán 35.933 personas a las 309.757 actuales; y que engordará en la parte superior, con 129.026 vecinos de más de 65 años, 6.540 más que los que se censan en estos momentos en los 211 ayuntamientos provinciales.
El dibujo de esta pirámide poblacional presenta el problema al que se enfrenta la provincia leonesa si no varían las tendencias demográficas actuales. Un trazo en rojo que contiene que con 453.474 personas para el año 2023, los 129.026 que superarán los 65 años supondrán el 47,1% de los leoneses. Una tasa muy por encima de la media nacional del 35,1% que, según la proyección elaborada por los expertos del INE, tan sólo superarán en España dos provincias: Orense, donde se espera un 56,7%, y Salamanca, con un 47,8%.
La subida de esta población mayor de 65 años, sumada a la menor de 16, hace que la balanza de contraposición de la franja intermedia no sea suficiente. El producto con el que la provincia se tendrá que enfrentar a una tasa de dependencia del 65,6%, lejos del 59,2% de media del territorio nacional. El augurio de que por cada tres personas en edad de trabajar en León habrá casi siete que se salen de la franja prevista hasta el momento para entrar en el mercado de empleo nacional.
No hay ninguna cifra que invite al optimismo dentro del estudio elaborado por el INE. Todo lo contrario. Un paisaje en con un lento declinar de la población al que se tendrá que enfrentar la provincia: 488.991 habitantes este año, 482.045 para 2015, 464.230 para 2020 y 453.474 para 2023. El horizonte hacia el que se acerca León, de acuerdo a las actuales tendencias demográficas arrastradas de los últimos diez años, si no hay un cambio. Una proyección que hará olvidar aquellos tiempos, allá por el año 1996, en los que en esta demarcación territorial vivían 517.191 personas.