El abogado defensor de Montserrat y Triana: "No estoy de acuerdo con que Isabel Carrasco muriera pero tengo que defender a mis clientas. Yo estaba en la mili y ya oí hablar de ella"

El abogado de Motserrat y Triana ha abierto la ronda de conclusiones definitivas en el juicio que se ha reanudado a las 5 de la tarde. José Ramón García ha comenzado alabando al abogado del PP, Ricardo Gavilanes, del que ha dicho que ha hecho una "buena faena, como los toreros", luego ha criticado al fiscal por solicitar que se deduzca testimonio del defensor de Raquel Gago al haber cometido un delito por ausentarse del juicio -"no me gusta que el fiscal haya hablado así de un compañero, no hay por qué contaminar al jurado con más teatro", ha dicho- y luego ha añadido: "No estoy de acuerdo con que Carrasco muriera pero tengo que defender a mis clientas".

"Sin la intervención del policía jubilado no sé si se hubiera detenido a estas tres personas porque la Policía es muy buena pero podía haber muchos sospechosos y aunque no hay que juzgar a la víctima, lo que había hecho ella antes tenía trascendencia", ha añadido.

"Yo estaba en la mili y ya había oído hablar de ella", ha comentado al jurado.

Después, ha hecho un silencio de 2 minutos y 17 segundos para escenificar el tiempo que pasó desde los disparos hasta la primera llamada al 112. A continuación, ha descrito que el trabajo del policíia Pedro Mielgo era seguir a carteristas, que son más "pacíficos" ha aclarado, quitan carteras pero no la vida, ha añadido.

Luego ha pasado al papel de Montserrat, de la que ha dicho que no tiró el bolso en el río porque había testigos y que lo hizo en el garaje porque no había huellas del crimen. El letrado ha insistido en la teoría de que Montserrat llamó a Triana antes de cometer el crimen.

¿TESTIGOS TOCADOS?

"A mi el testimonio de Mielgo me venía fenomenal", ha asegurado García, pero ha pasado de "héroe a villano" al mentir "aunque estoy muy mosqueado por no saber los motivos de ese cambio de versión. Luego, ha dejado caer la sospecha sobre los testigos y se ha preguntado si "alguien" los ha 'tocado' porque "Barazón (por Marcos Martínez Barazón, sucesor de Carrasco como presidente de la Diputación) también cambió de versión "y yo tengo derecho a hacer hipótesis".

Sobre Julio, el agente de la ORA, ha ironizado: "No ve lo que tiene que ver pero ve lo que no ve Raquel". Y después se ha preguntado en voz alta sin en todas las vigilancias tenía que estar esperando Raquel al lado del coche, en un papel de defensor también de la agente de la policía local. "Pues vaya trajín se traían...", añadió.

TRIANA, EL LESBIANISMO Y LAS PASTILLAS ANTICONCEPTIVAS 

Después, ha entrado en la vida sexual de la más joven de sus clientas y ha dicho que si Triana era lesbiana ¿para qué tomaba anticonceptivos? ¿Qué era, por la que le esperaba en Villahierro?, ha añadido.

 A continuación, ha hablado de la relación sentimental de Raquel Gago, que no es su defendida, con Fernando, un hombre casado. "Dicen ahora que lo del novio de Raquel fue un montaje", en referencia a la teoría que expuso Ricardo Gavuilanes, que defiende los intereses del PP. Y ha pedido que les expliquen la "movida" que han tenido cuando "se ha sabido" y sobre todo cuando se enteró "la otra", en referencia a la esposa de Fernando. Luego, ha dicho que no creía que Raquel sea tan "subnormal" como para prestar su bolso para el crimen.

"Había que solucionarlo porque era un asunto público", ha dicho el abogado de Montserrat y Triana. Si el muerto hubiera sido un vecino de León no habrían venido los policías de Burgos, añadio. "Por esas prisars se ha llenado de errores la investigación", ha zanjado.

Luego se ha preguntado que si Montserrat ya sabía que Raquel estaba en el plan, ¿para qué le iba a decir que la pistola la tenía una policía?.

"El trasfondo de este asunto es el despecho de una persona poderosa", ha apuntado. Luego ha descrito el momento del asesinato y ha asegurado que el disparo no pudo ser a más de un metro y que había restos de pólvora en la cazadora de Isabel Carrasco y el forense no dijo nada. Para tirar así no hace falta practicar tiro, ha concluido. 

Se sugiere que Triana estuvo de prácticas de tiro, ¿para qué si la que iba a disparar era su madre?, ha inquirido. Y luego ha pasado al asunto de la supuesta persecución y ha contado que cuando Triana se llevaba bien con Carrasco le resolvió el problemas fiscal del coche y cuando empezaron a llevarse mal "le tocaron todas las loterías de Hacienda".

Aunque se pudiera suponer que Isabel Carrasco no fuera la culpable de los males de Triana, para Montserrat daba igual porque tenía un "trastorno paranoide", ha mantenido el abogado defensor.