León sacará a concurso la renovación del alumbrado al margen de Somacyl
El Ayuntamiento desecha la vía de la consejería de Fomento y busca el consenso político.
Antonio Silván y Alfonso Polanco, ayer en Palencia en el punto público de recarga eléctrica. RAMIRO
álvaro caballero | león
No habrá renovación del alumbrado a través de la Sociedad Pública de Infraestructuras y Medio Ambiente (Somacyl). El Ayuntamiento de León «abandona esta vía», como confirmó ayer el alcalde, Antonio Silván, cinco meses después de que el Consejo Consultivo dictaminara que el organismo dependiente de la Consejería de Fomento de la Junta no podía actuar como «medio propio e instrumental» debido al cambio de la directiva europea reguladora, aunque dejara abierta la puerta para buscar otras fórmulas de contratación mediante convenio. Pero ante el riesgo de que una denuncia pudiera frenar la operación, el consistorio optará al final por un sistema de contratación abierta para que ejecute la infraestructura una empresa de servicios eléctricos, en un solo paquete y sin lotes para la entrada de varias pequeñas y medianas sociedades.
El criterio que se aplicará es el que «ha seguido Palencia», como expuso Silván durante el encuentro de ayer en la ciudad castellana, donde intercambiaron «la experiencia para poder beneficiarse de ella». «Vamos a lo posible», insistió el regidor de la capital leonesa, después de argumentar que «el instrumento es lo de menos», dado que «independientemente de la herramienta de financiación su coste no se va a repercutir a los ciudadanos».
Pese a este criterio asentado, aún no hay plazo para cumplir con el proyecto, que era una de las grandes bazas propuestas por el equipo de gobierno. El PP espera concitar el apoyo de la oposición municipal para sacarlo adelante, mientras en paralelo trabaja ya en la redacción de los pliegos que regirán el contrato.
El modelo elegido hace que la empresa adjudicataria sea quien asume por completo con el coste de la renovación de los 19.997 puntos de luz para adaptarlos a la tecnología de eficiencia energética, así como los 210 cuadros de control y el sistema de telegestión. A estos cerca de 11,3 millones de euros, según calculaba el estudio de Somacyl, se sumará además la factura de la luz, que se reducirá cerca de un 75% y quedará en apenas 662.407 euros al año.
A cambio de esta obra, el Ayuntamiento le pagará a la empresa un canon anual durante al menos 10 ejercicios, que enjugará la inversión hecha. La factura rondará los 2 millones: superior a los 662.407 del coste eléctrico a partir de la renovación, pero por debajo de los 2,7 millones que costaría si la iluminación actual estuviera a pleno rendimiento.