Diario de León

La jefa de la Udev tuvo claro desde el principio que había un plan para matar a Larralde

La policía asegura tajante que Gabarri y Casper no estaban en la trama y echa en cara a Carlos Helí que no pidiera explicaciones a Julio.

Aspecto general de la sala en la vista celebrada ayer. DL

Aspecto general de la sala en la vista celebrada ayer. DL

Publicado por
León

Creado:

Actualizado:

dl | león

La jefa de grupo de la Unidad de Delincuencia Especializada y Violenta (Udev) de la Comisaría de la Policía Nacional de León aseguró ayer que el nutrido tráfico de llamadas entre los sospechosos en el tramo horario anterior y posterior al crimen de Roberto Larralde hizo sospechar desde un primer momento de la posible existencia de un plan para acabar con la vida de la víctima en una actividad organizada.

«La investigación estuvo bien hecha y el listado de llamadas ya tenía cosas que no cuadraban. El encuentro entre estas personas no fue casual», aseguró después de ser preguntada como conoció la posibilidad de que el supuesto móvil fuera de carácter pasional. «Supimos de la relación de Julio y Miriam porque León es un sitio pequeño».

La responsable policial de la investigación por la muerte de Roberto Larralde en septiembre de 2014, por la que siete personas se exponen a penas de hasta 25 años de prisión en el juicio que ayer inició en la Audiencia Provincial de León su segunda semana, capitalizó la totalidad de la cuarta sesión de la vista, que se sigue por el sistema del jurado popular. Hubo de someterse a más de seis horas de interrogatorio, reiterativo en algunas fases de su desarrollo.

No fue lo único que llamó la atención a la responsable de la investigación: «Nunca había visto un ensañamiento igual contra un cadáver». Igualmente se sorprendió por el hecho de que Julio López se autoinculpase en el asunto de las colonias. Al día siguiente de la muerte de Roberto, se descubrió un plan para tratar de robar un camión de perfumes en una zona cercana a la que se cometió el asesinato y con al menos tres supuestos implicados en los dos asuntos. «Quizá Julio lo hizo para exculparse en un tema más grave, que era el del crimen».

«No descartábamos que se pudiera encontrar el cadáver en el río», reconoció antes de detallar que los perros que los guías caninos tardaron solamente cinco horas en encontrar el cuerpo de la víctima. «Habíamos pasado por allí antes inspeccionando la zona pero no se veía nada raro. Solo una zona revuelta».

GRAVE ENFRENTAMIENTO

Aseguró también que cuando llamó a la familia de la víctima para comunicar el hallazgo del cadáver se produjo un enfrentamiento en la puerta de la Comisaría entre los allegados al fallecido y Julio y Froilán, que acudían en ese momento a la Policía. «No sabemos qué hacían allí, nosotros no los habíamos llamado». Desmontó la teoría de Ramón Vega (supuesto autor material del disparo en la nuca a la víctima) según la cual los ciudadanos del Este que se quedaron con Roberto le llamaron dos veces para que volviera a recoger su excavadora: «Esas llamadas no existen, no están registradas».

DETALLE Chocante

Detalló la jefa de grupo de la Udev que resultó chocante ver en las imágenes del bar en el que se citaron cómo Ramón y Carlos Helí se daban la mano la segunda vez que entran «cuando acababan de estar juntos». A criterio de la Policía, sabían que les estaban grabando y de alguna forma, actuaron a sabiendas.

Un dato nuevo apareció en la sala. Froilán Álvarez, el detective privado, realizó una llamada a las 00,05 horas sustentada por una antena de telefonía de Puente Castro. En las imágenes se comprueba que el sospechoso estuvo fuera del bar durante 17 minutos.

«No existió unanimidad en las declaraciones de los investigados sobre quién organizó el viaje a Madrid. La empleada de confianza de Julio es la que nos parece más imparcial y según ella, fue idea de él», aseguró la responsable policial.

Julio López dedicó la pausa del descanso de la vista a aleccionar a su letrada de ayer, María Luisa Herrero, respecto a su versión de los hechos totalmente contrapuesta a la presentada por el fiscal. El empresario expuso a su abogada los puntos de desacuerdo y preparó la contrarréplica a conciencia.

Marcos García Montes cedió el testigo a su hijo Marcos García Ortega para ostentar en la sesión de tarde la representación de la acusación particular. Trabaja a la vez en otras tres causas penales de importancia nacional mientras se encuentra en León.

Por su parte, Ramón Vega pudo acudir al juicio pese al percance del jueves. Una caída le provocó daños en una rodilla. Ayer tuvo que auxiliarse en unas muletas para caminar.

Cinco miembros de la Udev serán interrogados hoy sobre los posicionamientos telefónicos de los sospechosos y sobre los registros. Será desde las 9,15 horas.

tracking