La noche más misteriosa

m. a. z. | león

La Sección Tercera de la Audiencia Provincial deberá dictaminar si la decisión del Juzgado de Instrucción número 2 de los de León de convertir en procedimiento abreviado la querella presentada por el entonces fiscal jefe de León, Emilio Fernández, contra el primer letrado defensor de Raquel Gago, se ajusta a derecho o si por contra no procede este trámite judicial.

El trámite de conversión a procedimiento abreviado consiste en facultar a las partes para que se pronuncien sobre si procede abrir causa penal contra el querellado o si por el contrario es más lógico archivar el asunto y dar por cerrado el tema. Mientras no se resuelva el recurso, no hay solución de continuidad.

Emilio Fernández se querelló contra Guerrero por entender que su desaparición en el transcurso del juicio por la muerte de Isabel Carrasco era un delito punible: «Debe dar explicaciones a esta Audiencia, a León y a toda España», aseguró el fiscal en la última sesión de la vista por la que las tres acusadas fueron consideradas culpables de la muerte violenta de la presidenta de la Diputación Provincial de León.

Guerrero desapareció de forma repentina a las 19.00 horas del 26 de enero de 2016. Había programado una reunión con su defendida para preparar el día posiblemente más importante de la vista para Gago. Sin embargo, el letrado murciano no se presentó al encuentro ni a la sesión del juicio de la mañana siguiente. Se suspendió la vista con preocupación notable (las circunstancias invitaban a pensar que algo grave le había ocurrido al letrado) e incluso hubo un conato de propuesta al abogado de Montserrat y Triana para que se hiciese cargo de la representación de Raquel por si su representante legal no volvía. De otro modo, cabía el riesgo de tener que suspender el juicio con todo lo que ello conllevaba.

A media mañana del 27 de enero Guerrero apareció en pleno centro de León, muy desorientado y sin tener demasiada conciencia de lo que había ocurrido desde la tarde anterior.

En su poder y en su defensa obra un informe médico que asegura que fue víctima de una afección neurológica, de la que se estaba tratando con profesionales de la medicina y para la que tomaba una medicación especial, que por la tensión de las jornadas iniciales del juicio, se había complicado.

Quienes le conocen aseguran que no es la primera vez que Guerrero sufre una incidencia de estas características. Le ocurrió algo similar en Zaragoza, pero en aquella ocasión terminó en un centro hospitalario de la capital aragonesa, donde se le trató a tiempo y se pudo avisar a su cliente.

El Colegio de Abogados de León tramitó un expediente disciplinario a Guerrero, que permanece paralizado a consecuencia del recurso en cuestión. Inicialmente se fijó para el abogado una sanción económica, pero todas las demás consecuencias quedaron paralizadas por este trámite judicial actual.

En la actualidad, Guerrero ya no ostenta la representación letrada de Raquel Gago, que decidió contratar los servicios de un nuevo equipo. Fermín sigue teniendo nuevos clientes en León.