Los muertos en carretera en León aumentan un 61,5%, hasta los 19
La cifra contrasta con la media nacional, donde se redujo un 1,5% frente a la subida del 2,5% en el número de fallecidos en la Comunidad
Castilla y León registró 125 fallecidos en las carreteras durante el año 2018, lo que supone tres víctimas más que el año anterior, con un incremento relativo del 2,5 por ciento, rompiendo la tendencia de caída en los fallecidos registrada en los dos años anteriores. Esas cifras contrastan con las registradas en el conjunto nacional, donde se perdieron 1.180 vidas, 18 menos que en 2017, con un descenso en términos porcentuales de 1,5 puntos.
El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, presentó este mediodía en Madrid, acompañado por el director general de Tráfico, Pere Navarro, el ‘Balance de siniestralidad en carretera’ correspondiente al año 2018, del cual se desprende que las provincias de Burgos y León acapararon un tercio de los fallecidos en la Comunidad, con 21 en cada una de ellas, si bien mientras en el caso de Burgos el número de víctimas descendió en dos (un 8,7 por ciento menos), en León aumentó en 8 (un 61,5 por ciento más).
En Ávila, el número de fallecidos en accidentes en vías interurbanas a lo largo de 2018 ascendió hasta las 14 personas (cinco más que en 2017), mientras que en Palencia se redujo hasta las ocho personas (cinco menos). En el caso de Salamanca, los fallecidos descendieron hasta 9 (dos menos), mientras que en Segovia aumentaron hasta las diez víctimas (una más), en Soria ascendieron hasta las 13 (cinco más), en Valladolid la cifra se mantuvo en catorce y en Zamora se redujo en siete personas, hasta los 15 fallecidos.
Grande-Marlaska explicó que las cifras presentadas son provisionales y únicamente aluden a los accidentes mortales ocurridos en vías interurbanas, con víctimas registradas hasta 24 horas después de producirse el accidente. Las cifras definitivas incluirán a las victimas a 30 días de accidentes ocurridos en vías urbanas e interurbanas.
En cuanto al número de accidentes mortales, en el caso de Castilla y León aumentó en términos similares al de la evolución de los fallecidos, ya que creció un 2,8 por ciento hasta los 111 siniestros mortales, frente a los 108 contabilizados en 2017. En la distribución por provincias, se incrementó en cuatro accidentes mortales en el caso de Ávila hasta los 13, se redujo en uno hasta los 18 en Burgos, aumentó en seis en León hasta los 19, descendió en tres en el caso de Palencia hasta los 7, bajó también en tres en Salamanca hasta los 8, se mantuvo en 9 en Segovia, aumentó en uno en Soria hasta los 9, se mantuvo sin variación en 14 en Valladolid, y se redujo en uno en Zamora hasta los 14.
Análisis nacional
El ministro del Interior afirmó que 2018 ha sido un año de transición en el que, después de dos años aumentando el número de fallecidos por accidente de tráfico, se ha conseguido frenar la siniestralidad a nivel nacional, “lo que podría indicar que estamos ante un punto de inflexión y cambio de tendencia”. No obstante, según expresó, habrá que esperar a 2019 para saber si ese cambio se confirma.
En la última década el número de fallecidos en accidente de tráfico ha disminuido en España un 46 por ciento (mil fallecidos menos), pasando de los 2.180 en 2008 a los 1.180 fallecidos en 2018. En ese mismo periodo, los desplazamientos de largo recorrido han aumentado un 5 por ciento, el parque de vehículos un 9 por ciento y el censo de conductores un 13 por ciento.
Por sexo, el 80 por ciento de los fallecidos son varones, frente al 20 por ciento de mujeres, porcentajes que se mantienen estables desde hace años. Por tipo de vía y accidente, el 74 por ciento de los fallecidos tienen lugar en vías convencionales. Concretamente el año pasado fallecieron en este tipo de vías 877 personas, 41 menos que en 2017 (-4,5 por ciento). Los accidentes más comunes en las vías convencionales han sido las salidas de la vía con 40 por ciento y 27 por ciento por choque frontal.
En las vías de alta capacidad los fallecidos han aumentado en un 8,2 por ciento respecto al año anterior. En 2018 han fallecido 318 personas en autopistas o autovías, frente a los 295 de 2017. Las salidas de la vía y las colisiones traseras y múltiples son los accidentes más frecuentes con el 40 por ciento y el 21 por ciento respectivamente. En estas vías de alta capacidad, el porcentaje de peatones atropellados fallecidos ha sido del 20 por ciento, concretamente 49 personas. En el caso de las vías convencionales, los atropellos a peatón han sido de 65.
Por tipo de usuario se confirma además la tendencia de que en los últimos años están aumentan los usuarios vulnerables fallecidos y reduciéndose los fallecidos usuarios de turismo. En 2011 los usuarios de turismos fallecidos era el 56 por ciento y en 2018 el 50 por ciento. En cambio, los usuarios vulnerables han pasado de ser el 30 por ciento en 2011 al 35 por ciento el pasado año.
La franja de edad con más fallecidos es la de mayores de 65 años con 249 fallecidos, 68 fallecidos más que el año anterior. De ellos el 60 por ciento han sido conductores, el 21 por ciento pasajeros y el 19 por ciento peatones. En el año 2011, los mayores de 65 años fallecidos representaban el 18 por ciento y el año pasado el 21 por ciento. Le siguen los de 45 a 54 años con 225 fallecidos y los de 35 a 44 años con 208 fallecidos. En el caso de los jóvenes, los fallecidos entre 15 y 24 años y de 25 a 34 años son el 13 y el 16 por ciento respectivamente.
Asimismo, el balance refleja que el 22 por ciento de los conductores y pasajeros fallecidos en turismos y furgonetas en 2018 no llevaban puesto el cinturón de seguridad en el momento del accidente. De los 211 fallecidos en motocicleta, 7 no utilizaban casco. Tampoco lo utilizaban 5 usuarios de ciclomotor de los 30 fallecidos en este tipo de vehículo. En el caso de los ciclistas, de los 36 fallecidos, 5 no lo llevaban, pese a ser obligatorio en vías interurbanas.