Condena unánime de todos los partidos
Todos los partidos políticos condenaron ayer los hechos violentos. Al rechazo del alcalde de León y de la alcaldesa de San Andrés, los dos municipios más golpeados por la protesta, se sumó la repulsa del Partido Popular, de la UPL, de Cs, del PSOE, de IU y de Vox.
Así, el portavoz municipal del PP, Antonio Silván, que fue muy contundente, tras elogiar el trabajo de los efectivos policiales, recordó que «el único enemigo de nuestra libertad es la covid-19 y estos actos no ayudan a nuestra seguridad sino que comprometen la de todos y ponen en riesgo la lucha que estamos librando desde marzo, una falta de respeto al sufrimiento y al trabajo sacrificado de nuestros sanitarios», señaló.
Para Cendón (PSOE), «el único enemigo es el virus» y tras censurar cualquier tipo de violencia subrayó que estas conductas «no representan a nadie».
La UPL mostró su «reprobación absoluta hacia unas actitudes incívicas e incluso delictivas. La democracia y nuestro sistema democrático permite la manifestación de voluntades y la sana crítica frente a posibles decisiones políticas, pero desde luego nunca puede amparar actitudes violentas que provocan daños en propiedades públicas y privadas», denunció Eduardo López Sendino.
Por su parte, Gemma Villarroel (Ciudadanos) aseguró que estos incidentes responden a «los estúpidos actos de unos inadaptados» y recordó al respecto que León es responsable y resiliente. Saldremos de esta juntos», apuntó en sus redes sociales.
También se manifestó sobre este asunto Carlos Pollán (Vox), quien mostró su «mayor repulsa a los radicales que están tratando de manipular a los españoles desesperados».
Mientras, Carmen Franganillo (IU) ofreció su apoyo al sector hostelero, «el más afectado por los incidentes», y criticó que la «extrema derecha» aliente a los violentos.
Además, el subdelegado del Gobierno, Faustino Sánchez, recordó también que el fin de estas medidas es preservar la salud pública «no coartar las libertades de los ciudadanos».