La casona de Sierra Pambley sufre un incendio mientras es restaurada

Dos camiones del parque de Bomberos de León se desplazaron ayer a las 15.05 horas para sofocar el incendio ocurrido en un cuarto de la segunda planta de la casona de la Fundación Sierra Pambley en la plaza de Regla. El foco se inició en una habitación pequeña que los restauradores utilizan como vestuario desde que se inició la rehabilitación del edificio en abril. A su llegada -informaron los bomberos- las llamas alcanzaban la cubierta, pero pudieron atajarse de inmediato. El director de la Fundación Sierra Pambley, Antonio Gamoneda, mostró su preocupación por los efectos del humo y el agua vertida por los bomberos para extinguir el incendio y lamentó que el incidente pudiera retrasar las obras de restauración de la sede del Museo Romántico de León. Gamoneda manifestó su temor por la pérdida de los valiosos papeles pintados que don Segundo, el tío de quien el fundador de Sierra Pambley heredó la casa, trajo de Inglaterra para decorar con las últimas tendencias de la segunda mitad del siglo XIX la casa que quería convertir en su hogar. «Menos mal que los muebles no estaban allí», aseveró el poeta. Sin embargo, el restaurador de la casona aseguró que los papeles no habían sufrido más daños que su ennegrecimiento a causa del humo. Esta decoración aún no se había restaurado y se cree que no requerirá más tratamientos que los previstos antes del incendio, es decir, una limpieza, la adhesión al muro de las zonas levantadas y la reintegración mediante injertos de las pérdidas. Las paredes se habían protegido para evitar que los papeles fueran manchados con la pintura del techo. Se desconocen las causas del incendio, que se produjo en el descanso del mediodía de los operarios, pero los bomberos descartan cualquier relación del fuego con el sistema eléctrico. En la sala había material inflamable como disolventes y sustancias que se utilizan en las labores de restauración. El humo que salía por las ventanas y el dispositivo de extinción causó gran expectación de los ciudadanos y turistas que pasaban por la plaza de la Catedral.