Diario de León

CRÓNICAS DE AGOSTO

El discreto ritmo de la economía

Publicado por
León

Creado:

Actualizado:

Ayer fue conocida la Encuesta de Población Activa correspondiente al segundo trimestre del año, y que ha resultado ser mejor de lo que cabía esperar a la luz de los discretos ritmos de crecimiento económico. En el referido trimestre, el paro se redujo en casi 55.000 personas y el empleo creció en unas 180.000, de modo que el desempleo se mantiene algo por encima de los dos millones de desempleados, un 11,1% de la población activa. Ésta alcanza los 16.240.000 trabajadores, un nuevo récord, con lo que se recupera la tendencia ascendente desde 1995, apenas interrumpida en el primer trimestre del año en curso. Si se confirman los presagios de que el fin de la ralentización está próximo por lo que el repunte podría llegar antes de fin de año (algo imposible de corroborar puesto que permanecen activas las principales incertidumbres tanto internas como internacionales), podrá decirse que nuestro país ha superado la crisis airosamente, sin una gran incidencia sobre el proceso de reducción del paro, que es y debe seguir siendo el principal objetivo macroeconómico de cualquier gobierno. Había bomba en Santa Pola Finalmente, apareció la bomba. Los etarras la habían enterrado en la Gran Playa de Santa Pola, dentro de una mochila y a un metro y medio de profundidad. El hallazgo, producido tras dos días de falsas alarmas, resulta desconcertante, tanto por la perversidad de quienes idearon y materializaron el atentado cuanto por la dificultad de las fuerzas de Seguridad del Estado en encontrar el explosivo, que pudo haber provocado otra matanza indiscriminada, inconcebible para cualquier mente en equilibrio y con plenas facultades. La dificultad para localizar la bomba agrava en todo caso la responsabilidad de los asesinos, ya que este incidente ha demostrado que la relativa piedad que a veces utilizan al anunciar con suficiente anticipación un atentado puede resultar inútil y producirse pese a ello la matanza. Caben en todo algunas preguntas retóricas, perfectamente inútiles pero necesarias: ¿en qué han mejorado las expectativas de la llamada «izquierda abertzale» con la penalidad que han padecido los vecinos de Santa Pola? El Partido Nacionalista Vasco debería reflexionar acerca de la gestión política que requiere su integridad democrática, que nadie debe cuestionar, en esta hora delicada de la lucha contra ETA y contra quienes abonan la lucha armada en el País Vasco. Las estrategias, perfectamente legítimas en política, deben ceder siempre a los principios, y son los grandes valores los que en esta hora están en juego. El nacionalismo vasco debería, quizá, modular sus reivindicaciones al ritmo de la razón moral, que en este momento pasa por la unidad democrática frente a los criminales. El Gobierno le ha tendido la mano, dispuesto a negociar sus demandas de desarrollo estatutario, y le solicita su contribución en esta lucha en que hay vidas en juego. Reducir esta coyuntura a los simples términos de la rivalidad política, de la enemistad personal entre líderes, de las dificultades de comunicación entre opciones poco compatibles, sería una muestra de cortedad de miras. Mientras tanto, un periódico estatal publicaba ayer una información que demuestra que Jesús Gil, inhabilitado como alcalde de Marbella hace cien días, sigue moviendo los hilos del municipio desde la sombra, en particular en todo lo concerniente al urbanismo, que está asimismo relacionado con sus negocios particulares. Estos hechos podrían constituir un manifiesto fraude de ley, y en todo caso parecería necesario que el ministerio público realizara un seguimiento en detalle de esta situación.

tracking