REACCIONES

PSOE. El candidato a la Alcaldía por el Partido Socialista, Francisco Fernández, aseguró que al equipo de gobierno «sólo le interesa la propaganda y los premios, pero la cruda realidad es que el casco histórico se va debilitando cada vez más y los edificios históricos desaparecen». Fernández alegó que el reconocimiento recibido hace dos semanas en París era solamente «un premio a pintar fachadas y poner baldosas». Polémica de horas. Francisco Fernández, recriminó a Vallejo que no se hubiera personado inmediatamente: «La importancia que se le da al casco histórico desde el Ayuntamiento queda demostrado una vez más, cuando el derrumbe ha sido a las 10.30 horas y, ahora, que son las 12.30 todavía no ha aparecido ningún responsable del equipo de gobierno». A estas declaraciones, el concejal de Urbanismo Cecilio Vallejo contestó indignado: «Lamento que diga eso porque fui yo en persona quien avisó a todos los partidos del Ayuntamiento que habíamos votado por unanimidad el proyecto. También sabían que yo estaba en una reunión y en la plaza estaban todos los técnicos del Ayuntamiento, de la Junta y la policía. Creo que he ejercido mi responsabilidad». UPL. El concejal de Patrimonio, Alejandro Valderas, aseguró ayer que su partido ha presentado una proposición no de ley en Fuensaldaña para la que la Junta se tome con más celeridad los asuntos de patrimonio y esperarán a tener los informes del concejal de Urbanismo para hacer declaraciones. Patrimonio debate hoy. Enrique Hermida, jefe del Servicio Territorial de Patrimonio, optó ayer por no hacer ninguna valoración de los hechos, a la espera de que tanto la arquitecta como el arqueólogo del área le presenten el correspondiente informe en la comisión de Patrimonio que hoy abordará este asunto como punto extraordinario, fuera del orden del día. La empresa y las causas. Begar, la empresa encargada del proyecto de rehabilitación, asegura que al mal estado en que se encontraba el edificio se ha sumado la climatología y todos los factores han provocado el derrumbe. «Era un inmueble que estaba abierto, en el que la cubierta no hacía su función de protección y los tiempos van pasando y los deterioros aumentando», aseguró el director general de Begar, Juan María Vallejo. Tal y como informó la empresa las obras de apuntalamiento y mantenimiento del edificio comenzaron hace casi tres años. «Nosotros lo que vamos a hacer es ejecutar las labores necesarias para que no haya un mal mayor, sin entrar a valorar la responsabilidad de cada una de las partes», añadió Juan María Vallejo.