«La globalización está en la misma cara de la moneda de la guerra»

«La civilización se juega mucho en esta guerra contra Irak porque es la primera guerra sin máscaras, sin pretextos», afirmó Ángeles Maestro poco antes de intervenir en la Fundación Sierra Pambley dentro de las jornadas de Subversión Necesaria que organizan las Juventudes Comunistas de León. Más que inevitable, Maestro cree que la intervención armada en Irak «está decidida» porque «los gobiernos de Estados Unidos y Reino Unido han conseguido subordinar a todos los gobiernos del mundo», a pesar de que, según dijo, una de las principales perjudicadas es la Unión Europea. «El 40% del petróleo que consume Europa viene de Oriente Próximo y es la que más va a sufrir», añadió. La ex diputada de IU pronosticó que la guerra será autorizada por el consejo de seguridad de Naciones Unidas y señaló su convencimiento de que los inspectores que revisan en las instalaciones militares «están señalando objetivos». «A pesar de todo -indicó- no están consiguiendo lo que Estados Unidos quería, el pretexto» de las armas de destrucción masiva. El petróleo y la potencia demográfica de Irak son las dos razones fundamentales para que se le intente «borrar del mapa» y llevar a cabo las previsiones geopolíticas que Estados Unidos dio a conocer hace unos meses, es decir, dividir Irak y Arabia Saudí en tres regiones y a Siria en dos. Estos planes contemplan además la deportación de un millón de palestinos y la ocupación militar de Irak durante 15 años. Maestro enlazó las razones de la guerra a la misma dinámica de la globalización capitalista. «Los que están dispuestos a hacer una guerra por el petróleo son los mismos que recortan derechos sociales y laborales y eliminan prestaciones sociale», indicó. «Es la misma cara de la moneda de la guerra», insistió al señalar que «no es una guerra tan lejana» y, muy al contrario, «forma parte de una estrategia muy grave que persigue liquidar conquistas sociales de la civilización». Maestro también denunció que la última reforma de la Otan suprimió el artículo 5º, que «hablaba de la necesidad de que la guerra fuera defensiva y dentro de su territorio». Esta omisión permite a la Otan «hacer la guerra en cualquier parte del mundo, excepto en América, y cuando esté amenazada la seguridad nacional», sin necesidad de amenaza de ningún ejército. Basta que tengan «alguna dificultad en el acceso al mercado del petróleo» o que «alguien que no sean ellos mismos tenga armas de destrucción masiva». Una postura que considera cínica si se tiene en cuenta que «desde 1942 Estados Unidos se ha gastado tres trillones de dólares en armamento nuclear y posee 6.000 cabezas nucleares». «A mí no me extrañaría nada que al fin se construya alguna mentira mediática», dijo tras denunciar el control de la información por unas pocas agencias. Ángeles Maestro dejó claro que «Irak es el país más laico de todo Oriente Medio en el que las mujeres van como les da la gana por la calle, incluso con minifalda» y subrayó que «la gente ya ha dejado de creerse aquello de que los marines fueron a Afganistán en misión feminista». Se mostró orgullosa de que España sea el país donde más oposición ciudadana se detecta a la guerra, si bien advirtió de que «el coste político no es que se produzca la guerra, sino que la gente se manifieste» como ha ocurrido en el caso del Prestige. «El coste no ha sido la decisión de Cascos de alejar el petrolero, sino la movilización ciudadana», por lo que hizo un llamamiento a que los leoneses tomen parte activa en las movilizaciones que se preparan para el 19 de enero en Torrejón y el 15 de febrero a escala europea. «Las cosas no salen solas, es necesario ocupar cada espacio», indicó. Ángeles Maestro se encuadra dentro de la Corriente Roja de IU y forma parte de la presidencia de la coalición.