León sólo ha registrado un caso de sarampión en los últimos dos años

El sarampión, explica el jefe del servicio territorial de Sanidad, está prácticamente erradicado en la provincia y únicamente se detectan casos esporádicos importados, es decir vinculado a personas procedentes de áreas geográficas donde la vacunación no es habitual. Casi la totalidad de la población leonesa está vacunada o inmunizada por haber padecido previamente la enfermedad, explica Santiago Travieso. El número de casos de la enfermedad ha pasado a ser prácticamente anecdótico. Según los estudios epidemiológicos en los dos últimos años sólo se ha detectado un contagio en la provincia. Pese al brote epidémico detectado en Almería, donde se han alcanzado los setenta casos en apenas dos semanas, no se ha decretado una alerta nacional sobre la enfermedad. Por ello, la Consejería de Sanidad no tiene previsto, de momento, realizar una vacunación preventiva. La vacuna, además, tiene vigencia para toda la vida con lo que no es necesaria una revacunación o la inyección de dosis de recuerdo, explica el responsable sanitario. Tasa casi igual a cero Los datos epidemiológicos recogidos por el Ministerio de Sanidad revelan que el pasado año se produjeron en Castilla y León sólo dos casos de sarampión, que entran dentro de los niveles de erradicación. La Organización Mundial de la Salud considera una infección erradicada cuando se producen menos de un caso por cada diez mil habitantes. En el 2001 no se diagnosticó ninguna infección, el año anterior habían sido detectados cinco, unas cifras que demuestran el descenso paulatino de la enfermedad coincidente con la generalización de la vacunación. En los años anteriores, se registraron, respectivamente, 18 casos en 1999 y 30 en el ejercicio anterior. Los datos autonómicos corresponden con los niveles nacionales, aunque se sitúan ligeramente por debajo. En todo el país, esta enfermedad de declaración obligatoria, generó 90, 87, 146, 244 y 446 casos en los últimos cinco años. Las tasas autonómica y nacional, respectivamente, se situaron en 0,08 y 0,23 casos por cada cien mil habitantes. Todos estos datos dan una idea de la importancia del brote epidémico detectado en Almería ya que, según explica Santiago Travieso, en esa provincia en sólo unas semanas se han contabilizado tantos casos como en un año en todo el territorio nacional. Pese a ello, no se ha decretado una alerta sanitaria y, de momento, las comunidades autónomas restantes no tienen orden de realizar ningún programa de seguimiento de la enfermedad. La Organización Mundial de la Salud ha fijado el año 2007 como fecha clave para conseguir la erradicación de esta infección en el área geográfica europea que no hace ni siquiera veinte años generaba más de 2.000 casos anuales en la provincia de León. La vacuna, con la que se trabaja desde hace casi cuarenta años, ha permitido esta pre-erradicación; las tasas de cobertura vacunal alcanzan ya el 97% y su eficacia es tan alta que en el año 2000 se adelantó en el calendario oficial de vacunación la segunda dosis, incluida dentro de la triple vírica con la rubéola y la parotiditis, de los once a los seis años. El último brote El último brote de la enfermedad en la provincia se produjo en el año 1996: casi un centenar de casos entre jóvenes de dieciséis años, que pudo corresponder con una fallo vacunal.