La comisión de conflictos da 15 días a Soto para que se defienda ante UPL

Covadonga Soto no compareció ayer ante la comisión de conflictos de la UPL, pese a estar citada junto al concejal de Cabrillanes José Álvarez, ambos «encausado» por «descalificar» a altos cargos del partido. Joaquín Otero no sabe nada. «Ni debo saber nada ni pinto nada», aseguró el secretario general de la UPL, en relación con la reunidón que durante más de dos horas mantuvieron los cinco miembros que integran la citada comisión de conflictos. Otero insinuó, desde la sede del partido, donde también tuvo lugar el «cónclave» contra Soto y Álvarez, que ignoraba este encuentro y los términos del mismo. Agregó que se mantenía al margen para que la instrucción «sea justa». Covadonga Soto, única concejala leonesista excluida del reparto de los cargos que detentaba José María Rodríguez de Francisco antes de dejar la militancia en la UPL, podría ser penalizada por el partido por criticar con dureza a su compañero de partido y teniente de acalde, Javier Chamorro, al que acusó de «cobarde». La comisión de conflictos -presuntamente independiente- debía abordar anoche también las declaraciones del concejal de Cabrillanes, José Álvarez, quien llamó «traidores» a los actuales dirigentes leonesistas. El quinteto que resuelve los conflictos del partido guarda un absoluto silencio. Según ha podido saber este periódico, la comisión decidió finalmente conceder un plazo de quince días para que tanto Soto como Álvarez preparen su defensa, presenten alegaciones y las pruebas que estimen oportunas. Es la primera vez que UPL abre un procedimiento de este tipo contra dos militantes y cargos públicos, por lo que se prevé que será largo. Otras fuentes consideran, en cambio, que la dirección del partido no sabe cómo resolver el asunto y está dando largas, ya que en el caso de Soto, la concejala se mantiene leal al partido y al pacto municipal, pese a su afinidad con De Francisco. Soto se niega a hacer declaraciones desde hace días.