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Sanidad reclama una cartera de recursos sociosanitarios similar a la de servicios médicos

Los equipos de León han detectado ya más de 2.500 grandes dependientes

La Junta aplica medidas como la elaboración de informes para evitar un «colapso»

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R. Martín - león
León

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Los equipos sociosanitarios de base de León han realizado ya una primera valoración de más de 2.500 grandes dependientes residentes en sus domicilios (más de 1.600 en el área de salud de León 900 en el área del Bierzo) como paso previo a la entrada en vigor efectiva de la Ley de Dependencia. Estos discapacitados forman parte de los más de 14.000 que, como primera estimación, podrán acogerse en la comunidad a los recursos que garantizará la normativa y que, según precisaron ayer los responsables de la Junta en León, «se está aplicando con total incertidumbre». La directora general de Planificación y Ordenación Socionitaria, Milagros Marcos Ortega, apuntó que es necesaria una revisión de esta ley pues excluye aspectos fundamentales como la implicación sanitaria. La exclusión de los aspectos sanitarios es, a juicio de Marcos Ortega, uno de los principales lastres de la normativa. «Estamos reclamando la inclusión de una cartera de servicios sociosanitarios básica pues estas prestaciones fueron excluidas expresamente», explicó. Esta cartera garantizaría «la atención a esas personas que lo necesitan, tal y como hace el Plan Sociosanitario de Castilla y León, incluso cuando requiere recursos de media y larga estancia» además de avalar la igualdad de derechos y prestaciones del discapacitado en todo el territorio nacional. La responsable de Planificación acudió ayer a León a la presentación de la Guía de Gestión Compartida de Casos, un modelo de atención social y médica para personas con necesidades especiales. Este modelo, precisó supone dar un paso más allá de la Ley de Dependencia que excluye esos aspectos sanitarios». «Es necesaria la inclusión de personas con conducta drogodependiente o trastornos de alimentación que necesitan un servicio único que garantice un tratamiento social, un tratamiento sanitario y la coordinación entre ambos para que dé respuesta a sus problemas de salud». Medidas anticipatorias La Junta, explicó Marcos Ortega, ha tenido que implantar una serie de «medidas anticipatorias» a la entrada en vigor de la Ley de Dependencia para «evitar el colapso» de los servicios y a modo de ejemplo incluyó el papel de la enfermería en la valoración real de las necesidades de los dependientes y el modelo de coordinación de asistencia en Servicios Sociales y en los centros de salud para paliar posibles deficiencias. Estas medidas han permitido detectar ya más de dos mil grandes dependientes y preparar los informes sanitarios necesarios para la posterior reclamación de prestaciones. Marcos Ortega encuadró en este mismo marco la guía que ayer se presentaba y que tal y como explicó a los profesionales de atención sociosanitaria fija un modelo de asistencia para las personas que requieren una atención integral. La guía establece un baremo de necesidad de cuidados por patrones funcionales (percepción, nutrición, actividad, sueño y descanso), la escala de Barthel usada en esa primera valoración de grandes dependientes, la valoración social y familiar (la red de apoyos y cuidadores del dependiente) y los recursos idóneo para la intervención conjunta. Los 150 integrantes de los equipos de coordinación sociosanitaria de base de León acudieron ayer a la jornada de formación en aplicación de la Ley de Dependencia organizada por la Consejería de Sanidad. En este encuentro se destacó que existen actualmente en la provincia 31 equipos de asistencia social y médica, 21 de ellos en el área de salud de León y diez en el Bierzo. «La actividad de estos equipos se refleja en un total de 161 casos de personas dependientes atendidos en situaciones de gran complejidad y con importantes cargas asistenciales», explicó la directora general.