La falta de suministro eléctrico compromete la puesta en regadío de 3.500 hectáreas en el sur leonés

La falta de suministro eléctrico pone en riesgo la entrada en regadío de más de tres mil quinientas hectáreas del municipio de Castro y Villaornate. Los agricultores de esta zona están dispuestos a exigir soluciones a la consejería de Agricultura de la Junta,, responsable de la gestión del Instituto Tecnológico Agrario, que gestionó las obras de instalación de líneas eléctricas con el fin de mover los sistemas de riego a la demanda. El problema de suministro que compromete el arranque de los regadíos hasta el mes de junio, como fecha más próxima, ha dado origen a un gran malestar en la comarca del sur de León, donde los regantes se han decidido en asamblea a solicitar una reunión con Silvia Clemente, consejera de Agricultura, para que inicie los trámites necesarios que permitan la llegada del agua en primavera. Tal y como quedó de manifiesto en la asamblea de regantes de la comunidad de la Margen Izquierda del Porma, los cultivos de esta zona necesitan de agua en primavera para sus desarrollo. «Y es en abril cuando tiene que llegar el agua, según se comprometió el Itacyl a la entrega de las obras», subrayaron. En descargo de su enfado por las escasas posibilidades que tienen de que llegue el agua a tiempo, los regantes recordaron que ya hace un año que solicitaron una solución para este asunto. «Ahora, si nadie se preocupó de asegurarnos el suministro eléctrico a pesar de saber que la subestación no bastaba para esta demanda, es preciso que la Junta disponga los generadores suficientes para que el agua no falte en abril», indicaron.