La gran fiesta del alfoz

Cerca de cuatro mil personas acudieron ayer a participar en una de las romerías más multitudinarias de la provincia de León, la de la Sobarriba. Los veinte pueblos, más las cofradías de Paradilla y Arcahueja, sacaron a sus vírgenes en procesión, por las inmediaciones de Valdefresno, acompañados por ocho pendones de la zona y por la multitud de romeros desplazados a Valdefresno. Como invitada especial este año, la presidenta de la Diputación de León, Isabel Carrasco, acudió para acompañar a la comitiva en un día tan señalado para este municipio. «Estamos encantados y muy agradecidos por la presencia de Isabel Carrasco este año», comentó el alcalde de Valdefresno, Carlos Gutiérrez, que confirmó el rotundo éxito de la edición de este año.

La presidenta destacó la apuesta de la institución provincial con el municipio de Valdefresno y sus pedanías, donde en esta legislatura se han invertido más de dos millones de euros que han permitido, entre otras actuaciones, mejorar la carretera de Las Lomas, la mejora de carretera entre Villaobispo y Villafeliz de la Sobarriba, las actuaciones en cinco consultorios médicos o para la renovación de redes. La Diputación también ha financiado la estauración de tallas y retablos en las parroquias de Navafría, Valdefresno y Villafeliz, así como para la restauración de las iglesias de Paradilla y Villavente.

Después de la procesión, todos los romeros celebraron una misa, tras la cual comenzó la comida campestre en la que se repartieron unos tres mil bollos, que se quedaron escasos por la cantidad de público que registró la romería este año, y se compartieron otros manjares traidós por los vecinos. Después de comer la fiesta continuó a lo largo de la tarde con los tradicionales bailes regionales, con el corro de lucha leonesa, que en esta zona cuenta con muchos adeptos, y con la discoteca móvil que puso fin a la jornada.