León vuela bajo

León vuela bajo para tocar el cielo. Y no se trata de proclamas leonesistas, sino de hechos, como lo ha demostrado este fin de semana el jiminiego Pedro Antonio San Juan, en Villanueva de Jamuz, al revalidar su título de campeón de Castilla y León de cetrería en la modalidad de vuelo bajo a pluma (se utilizaron faisanes en el campo de vuelo) y cuajar una buena actuación en vuelo bajo a pelo (conejo), en el que no logró revalidar el título obtenido en el mismo escenario hace ahora un año.

San Juan se quedó a las puertas del doblete, en el segundo lugar. La corona de laurel en vuelo a pluma correspondió en esta ocasión a un vallisoletano, Julio César Revenga. Pero el subcampeonato deja claro que la estepa cerealista del municipio de Santa Elena de Jamuz es un buen campo de entrenamiento para la caza con rapaz, tal y como lo demuestran los títulos de San Juan, vigente campeón de España en pluma, que ya piensa en el nacional, en el que deberá defender el título.

Las series finales se desarrollaron durante la mañana de ayer, cerca del castillo que los Quiñones poseían en Villanueva de Jamuz, ante más público que en la jornada del sábado. En el último fin de semana de septiembre, Villanueva ha contado este año con el clima más frío de las tres ediciones consecutivas de los campeonatos autonómicos que ha celebrado.

Tras la entrega de trofeos, Pedro Antonio San Juan, que no se veía como favorito a revalidar sus títulos al contar este año con pájaros muy jóvenes, destacó la fuerte competencia entre los participantes y su buena estrella. «Hubo suerte», señalaba sobre su primer puesto en pluma, aunque también el trabajo con las rapaces influye: «A parte de venir a tope, hay que reconocer que tienes que tener suerte», añadió.

Dos azores «sin probar». El campeón no vio el lance de Julio César Revenga que le relegó al segundo puesto en pluma. El de Valladolid consiguió más puntos del jurado, razón por la que supone un mayor acierto de este en su caza. De nuevo aparece la fortuna en sus manifestaciones. Ganar «depende de la suerte, del trabajo del cetrero con sus pájaros y de factores exteriores», que pueden malograr la participación.

El de Jiménez de Jamuz voló con dos azores finlandeses -"variedad de mayor tamaño que la que se encuentra en la península Ibérica-". Un macho y una hembra de cuatro meses, de los que «no conocía su potencial porque estaban sin probar. Sin embargo, ha funcionado todo lo que habíamos trabajado», explicó el cazador.

Además, el cetrero leonés fue el único en Villanueva de Jamuz que hizo presa en todas las modalidades en las que compitió. En la Copa Villanueva de Jamuz a vuelo bajo sobre señuelo mecánico, fuera de la competición autonómica, fue el único que logró hacer presa, añadiendo éste a sus méritos del fin de semana.

San Juan ya piensa en su próxima competición, los campeonatos nacionales, que posiblemente se celebren en diciembre, en el mismo escenario que el año pasado, la localidad sevillana de Osuna.