La CHD asegura que todos los embalses tienen resguardo frente a las crecidas
La Confederación Hidrográfica del Duero aseguró ayer que todos los embalses de la cuenca disponen de un resguardo suficiente para retener posibles crecidas. Según señaló en un comunicado, «en la mayoría de los casos ese resguardo es bastante superior al mínimo fijado en la Comisión de Desembalse».
La Confederación apunta a que la situación general es de «crecidas moderadas en la mayor parte de los ríos», una circunstancia que se corresponde «a un temporal moderado de lluvias» que no han dado problemas en la provincia de León, aunque sí en otras zonas.
Así, en la provincia en el embalse de Villameca se ha comenzado a soltar un caudal de 2 metros cúbicos por segundo, para mantener el resguardo que, con 5 hm3 , se sitúa al límite del consignado en la Comisión de Desembalse.
Los pantanos leoneses
En el resto de pantanos leoneses, la situación está completamente controlada. En concreto, Riaño, con un resguardo muy superior al exigido, se encuentra al 63% de su capacidad, con un volumen de resguardo de 240 hm3 , frente al 75 establecido por la comisión.
En el Porma, el volumen de agua almacenado se sitúa en el 58%, con 134 hm3 de resguardo y 75 designados.
En Barrios de Luna, el porcentaje de llenado alcanza el 51% con un resguardo actual de 151 hm3 y 40 establecidos en la comisión de desembalse.
La situación más complicada en la comunidad se sitúa en la subcuenca del Arlanza, donde la crecida es importante, y se espera que se note a lo largo del lunes en el Pisuerga, aunque no será complicado. Debido a esta crecida, además del desembalse de Villameca, también se está soltando caudales en el embalse de Úzquiza, de 20 hm3 por segundo. También se ha soltado agua en el embalse de la Cuerda del Pozo, en el Alto Duero, pese a que aún no se ha llegado al resguardo mínimo, según destacó la CHD. En este caso se ha empezado a soltar un «caudal moderado» de 10 hm3 por segundo para prever posibles crecidas de los ríos.