Una tierra en litigio

Los límites territoriales han sembrado de conflicto la historia de España, pero pocos casos se extienden tanto en el tiempo como el litigio que tiene enzarzados desde el siglo XVIII a Cabrillanes (León) y Somiedo (Asturias), que pugnan por la propiedad de 670 hectáreas en un litigio de "mojones".

El Tribunal Supremo ha fallado recientemente a favor del Ayuntamiento de Cabrillanes, por lo que el municipio asturiano deberá reconocer la titularidad de estos terrenos en base a un documento publicado en 1788, en el que los representantes de Somiedo, se supone, reconocieron los límites de su propiedad.

Se trata de las piedras número cuatro a número ocho que, según una Real Cédula Ejecutoria del año 1788, cuyo original se custodia en la Real Chancillería de Valladolid, recoge lo acordado en un encuentro el 4 de julio de 1785 "día y hora de las cinco de la tarde, poco más o menos", según reza el texto.

"...dicho moxón le reconocían por divisorio de las tres mencionadas jurisdicciones de Babia, Laciana y Asturias".

"Desde él cortaba la raya y división de la linde de Babia y Asturias, por el corriente del agua avaxo desde el denominado moxón... cuyo deslinde dixeron los diputados ser y que según corren las aguas de los arroyos zitados contra la parte de Babia, todo es de su jurisdicción".

A este hecho se lleva acogiendo históricamente el municipio de Cabrillanes, por aquel entonces una localidad denominada Babia de Suso, en la comarca leonesa de Babia, con un documento que ha aportado en la multitud de ocasiones en las que, desde aquel siglo XVIII, ha acudido a la justicia para aclarar la situación.

Antes, en el 9 de agosto de 1733 se registró un documento en el que "reconocen los vecinos del Puerto de Somiedo el derecho de mancomunidad que tienen los de La Cueta en el aprovechamiento de pastos hasta el arroyo de Ordial y que, a pesar de la mancomunidad del terreno, confiesan ser término de Cabrillanes".

El 1 de julio de 1882, en un escrito denominado Acta de Deslinde entre los ayuntamientos de Somiedo y Cabrillanes, el municipio leonés sostiene como línea divisoria "el terreno que se encuentra desde la Fuente del Obispo siguiendo el camino real hasta el puente cimero de la entrada del Puerto".

"Hasta tiene establecida feria en el sitio llamado Campo de Babia administrando los productos de ellas y percibiendo los derechos de Consumo de la taberna que un vecino del mismo Puerto tiene establecida junto al puente de la cimera sin que por parte del Ayuntamiento de Somiedo se haya hecho reclamación alguna".

Al año siguiente, 1883, representantes de la Diputación de Oviedo y del Ayuntamiento de Pola de Siero citaron a portavoces de Cabrillanes en la localidad de Fuente del Obispo, donde se ubica el "mojón cuatro" en el que se inicia la disputa, sin que acudiera nadie de la parte leonesa.

El conflicto se recuperó en el siglo XX, después de que el Instituto Geográfico Nacional, a través del Ejército, analizara la línea divisoria y señalara los mojones comunes a los términos de Somiedo y Cabrillanes, y que colocó esas 670 hectáreas del lado de la vertiente de Asturias, avivando el litigio.

Ahora, el Tribunal Supremo, en un auto de diciembre de 2013, pero comunicado a los abogados de las partes hace unos días, desestima los recursos presentados por el Ayuntamiento de Somiedo y el Principado de Asturias ante otra sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Madrid que reconocía los derechos leoneses.

La sentencia, que es "firme y definitiva", se deberá notificar en el plazo de dos meses a las administraciones implicadas, entre ellas el Ministerio de Administraciones Públicas, la Junta de Castilla y León, el Principado de Asturias y los ayuntamientos enfrentados para "ejecutarla voluntariamente".

El abogado del Ayuntamiento de Cabrillanes, Mario García Méndez, ha explicado a Efe que la mayoría de esos terrenos ubicados en las 670 hectáreas en liza son comunales, por lo que pasarán directamente a gestión pública "para que el pueblo se las quede".

La frontera entre León y Asturias en esta zona de la comarca de Babia quedará delimitada ahora por una localidad, Santa María del Puerto, que no existía en el siglo XVIII: "El pueblo no lo queremos para nada. No lo reivindicamos", ha bromeado el letrado.