El descenso de la remolacha influyó en la multa del maíz

Con el cierre de dos nuevas fábricas de Ebro Agrícola, serían ya cinco las azucareras que han cerrado en Castilla y León en los últimos cinco años, según denunció ayer el procurador socialista Antonio Losa. Además de la inquietud que esta situación provoca en el sector remolachero, el socialista destacó el abandono del cultivo de remolacha que progresivamente se viene sufriendo en Castilla y León. La desaparición de las fábricas de Veguellina, Venta de Baños y Salamanca supuso un descenso de la superficie sembrada de remolacha de 21.938 hectáreas entre los años 1998 y 2001. Según Losa, este descenso ha revertido íntegramente en el cultivo de maíz, que el año pasado aumentó su superficie en 55.000 hectáreas. Por esta razón, los cultivadores de maíz tuvieron una penalización en sus ayudas de 16,22 millones de euros, de los que 1.075 «serían imputables al descenso del cultivo de remolacha». Por todo ello, el socialista culpó al progresivo cierre de azucareras de la situación que actualmente vive el cultivo «más rentable y más social que actualmente tienen los regadíos castellanos y leoneses».