«En madera no hay trabajos perfectos, pero algunos se acercan»

-¿Ha cambiado mucho el oficio de carpintero en estos años? -Bastante, y en cierto modo para mejor. La maquinaria ha ayudado mucho al carpintero a mejorar sus obras y a emplear menos tiempo en realizarlas. Antes todo era a mano y había cosas que no se podían hacer o llevaban mucho tiempo. Todo eso ha cambiado como también la calidad de la madera. -¿Le ve futuro a este sector? -Cada vez más. La gente se ha dado cuenta que la madera, además de por su servicio y vistosidad, también ofrece durabilidad. Eso sí, siempre que se utilice madera de buena calidad y con buenas condiciones de secado. Esa es la base fundamental de una carpintería. -¿Llega a cansar este trabajo? -Si te gusta no. Bien es cierto que hay que ser constantes y hacer muchas horas, pero la satisfacción que te produce una obra acabada y bien hecha vale mucho. Lo mejor es ver como lo que en un principio es un boceto o idea se convierte en realidad. -Y la materia prima que es la madera, ¿es ahora mejor? -Bastante. Por ejemplo, antes se utilizaba madera de derribo, vieja y en no muy buenas condiciones, para hacer los marcos. Ahora se emplea madera de Suecia o Guinea, de unas condiciones excepcionales para hacer lo mismo y, sin duda alguna, el resultado final gana en todos los aspectos. -La gente que acude a usted, ¿va con una idea predeterminada o se deja aconsejar? -Los hay de todo, aunque en la mayoría de los casos la gente nos pide consejo. Bien es cierto que los quieren una determinada cosa, pero también buscan un asesoramiento de un profesional para salir de dudas y, en cierto modo, buscar lo mejor. -¿Qué es lo que más trabaja hoy en día? -Últimamente en lo que más trabajo es en mesas, escaños y luego carpintería en general. También ventanas y puertas y algo de talla. -¿Y que madera es la que más utiliza? -Pino de Suecia, teca y negrillo. Sin duda alguna porque son las mejores. -¿Le afecta el posible intrusismo que pueda existir? -A la larga nos beneficia, aunque en un primer momento ocurre todo lo contrario. A veces la gente se cree que puede hacer las cosas por su cuenta y luego se encuentran con que el resultado no es el esperado y acuden a nosotros. -¿Existe un trabajo que pueda considerarse perfecto? -Nunca. La madera es un ser vivo y como tal necesita de una actuación especial. También depende del carpintero y, a fe de ser sinceros, el hombre, como imperfecto que es, todavía no ha llegado a realizar obras perfectas, aunque hay algunas que se le acercan bastante.