Diario de León

El campo se enfrentará a "una hecatombe total y absoluta" si no llueve pronto

Asegura que solo se salvarán los cultivos de regadío, y que para el resto el agua llegará "como máximo hasta agosto"

La situación actual es "muy delicada", asegura Matías Llorente. MARCIANO PÉREZ

La situación actual es "muy delicada", asegura Matías Llorente. MARCIANO PÉREZ

León

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El vicepresidente de la Diputación de León y presidente de la Comunidad de Regantes de la Margen Izquierda del Porma, Matías Llorente, ha asegurado esta mañana que la situación del sector agrícola y ganadero de la provincia va a ser una "auténtica desgracia, una hecatombe total y absoluta" si no cambia la situación meteorológica y empieza a llover. 

Aunque asegura que dos de los cuatro pantanos leoneses están ahora mismo "bastante bien", como es el caso del Porma, la situación actual es "muy delicada", ya que "nunca antes habíamos empezado a regar tan pronto, y con una superficie tan grande sembrada de remolacha y de maíz que no va a nacer si no se riega". Llorente asegura que "regar para nacer" a estas alturas del año implica "un riesgo muy grande", ya que "es muy posible que con los seis mil metros cúbicos que hay en el Porma salvemos algunos cultivos pero lo que es por inundación es muy posible que el agua no llegue hasta el mes de agosto".

Por eso insiste en que si no cambian las cosas puede ser una "catástrofe total", ya que encima es el año en el más caros han pagado los agricultores los impus (las semillas, los fertilizantes, la electricidad), por lo que "si encima no hay agua no hay producción", por lo que "estamos en un año muy complicado, en el que puede  que haya pérdidas millonarias y en el que encima nos quedemos sin cosecha", lamento el ex sindicalista agrario, que afirma que todo el maíz de secano se puede perder.

Llorente asegura que la guerra de Ucrania está siendo además ya "un problema importante", ya que "nos están metiendo todos los cereales y están hundiendo los mercados, de hecho hay países que están prohibiendo la importación, y claro, la solidaridad está muy bien, pero primero tienen que comer los de casa".

El vicepresidente aseguró además que los agricultores que han venido negándose a la modernización de los regadíos "lo van a pagar muy caro", por son los cereales y la colza de las zonas de regadío las únicas que se pueden salvar si la situación no mejora. "El resto no tiene ninguna garantía, no hortícola ni frutales y menos en inundación ya que en agosto no habrá agua".

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