Diario de León

| Reportaje | Negociación en el cementerio |

Todo por una herencia

Begoña Díez (a la izquierda) discute con una de sus hermanas

Begoña Díez (a la izquierda) discute con una de sus hermanas

Publicado por
José María Campos - corresponsal | almanza
León

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Begoña Díez, natural de Almanza, ha iniciado una protesta en el cementerio de esta localidad para solicitar el reparto equitativo de la herencia de su padre. Pretende permanecer día y noche junto a la tumba de su padre para que se vuelva a realizar el reparto de la herencia dado que, según ella, las valoraciones que se han hecho de las propiedades no son las correctas. Por ello espera que, por parte de la justicia o de sus hermanos, se haga una nueva valoración. Tras la muerte de Julio Díez Fernández en 1987 y transcurridos unos años se procedió al reparto de la herencia entre sus ocho hijos: Ester, Tinina, José Luis, Eleuterio, Rufina, Rosalía, Tomás y Begoña. Begona Díez señala que dado que no había acuerdo entre los ocho hermanos a la hora de repartir y valorar las propiedades se nombró un contador-repartidor quien estableció ocho lotes valorados cada uno en 1.107.750 pesetas. Begoña Díez, la hermana menor y maestra, recuerda que los lotes tienen el mismo precio final, «pero la realidad es que hay propiedades que se las aplicó un valor inferior que el real. Así la vivienda y el molino de la familia se valoraron en 600.000 pesetas frente a las 502.250 pesetas de una finca de secano de dos hectáreas». Para la hermana menor existen dos lotes elevados en propiedades y uno, el suyo, que a la hora de la verdad, no tiene el valor que se le adjudicó. «Lo único que estoy pidiendo es que se haga la voluntad de mis padres: que se hiciesen lotes iguales. El contador-repartidor si cometió errores habrá que ver de que forma se pueden subsanar ya que su único objetivo era haber hecho lotes lo más iguales posibles», puntualizó Begoña Díez. Además apuntó la menor de los hermanos, que su lote, el número cuatro, es el que todos sus hermanos reconocen que no tienen nada, «luego, ¿por qué no lo subsanan?».

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