La localidad despide unas fiestas llenas de gastronomía y carrozas

Los pueblos de la comarca despiden sus fiestas a golpe de fin de semana. Villacé, perteneciente al Ayuntamiento de Villamañán, elaboró unos festejos donde las competiciones de baraja y la gastronomía fueron las grandes estrellas. Destacaron, por tercer año consecutivo, los campeonatos de chinchón, subastado y mus. La capacidad culinaria tradicional de la comarca se vio reflejada en ofertas abiertas al público presente de pan con chorizo, requesón o chocolate. Asimismo, el exitoso desfile de disfraces hizo disfrutar a todos los habitantes que cada año se ponen de acuerdo para elaborar un disfraz en común. En esta ocasión, las carrozas iban ataviadas de los años 70 por lo que las calles de la villa fueron testigos del color y las estridencias que requirió el momento. Asimismo, desde la Comisión de Festejos se quiso sorprender al pueblo emulando la reciente y todavía fresca boda real donde los más atrevidos imitaron a los príncipes de Asturias, la duquesa de Alba, el príncipe de Hannover y los padrinos del acontecimiento donde no faltó un párroco de la vieja escuela.