Ruiz: «Con la nueva potabilizadora se acabará el agua de mala calidad»

La vicepresidenta de la Junta de Castilla y León, María Jesús Ruiz, inauguró ayer la primera fase de la planta potabilizadora de Santa Marina del Rey, cuya construcción ha exigido un año de trabajo y una inversión de casi cuatro millones de euros, abonados por la administración de la autonomía y los ayuntamientos a los que beneficia, estos últimos con un 10%. El primer tramo de la obra beneficiará a 16.000 habitantes y afecta a Santa Marina del Rey, Benavides de Órbigo, Villares de Órbigo y Villarejo de Órbigo. Se abastece a nueve localidades correspondientes a estos municipios. Ruiz entiende que de esta forma se hace desaparecer el fantasma del desabastecimiento «y la mala calidad de las aguas». Además a partir de ahora también se podrá hacer frente a las múltiples variaciones de población, que podría recibir servicio incluso triplicando las cifras actuales. Esta primera fase que se pone ahora en marcha, que surte de agua por el sistema de gravedad, desde Benavides de Órbigo se complementará en breve con la segunda, que esta a punto de iniciar las obras. Las bombas de Santa Marina del Rey impulsan por medios mecánicos el líquido elemento hasta Benavides, y en ambas fases, es común la intención de surtir a posibles polos industriales, que puedan surgir en el futuro. Los sistemas de tratamiento de aguas en la nueva planta son los más modernos que se conocen en la actualidad. Según Ruiz, una de las prioridades de la Junta «es potenciar y aumentar los sistemas mancomunados para poder hacer frente a los retos que se plantean a medio plazo», insistió la vicepresidenta. La obra cuenta también con dos depósitos reguladores de 2.400 y 3.100 metros cúbicos, resprctivamente. «Con la dotación que hoy se estrena, se podría hacer frente incluso a una demanda triplicada» MARÍA JESÚS RUIZ Vicepresidenta de la Junta