Al escaparate, que no a la venta
El comercio tradicional luce sus mejores galas con elementos de la Semana Santa.
Festones se ha convertido en un clásico de la Semana Santa en escaparatismo .
Festones se ha convertido en un clásico de toda la vida y en Semana Santa lo borda. Las Antillas ofrece dos versiones, en Burgo Nuevo y en Gran Vía de San Marcos, a cada cual más atractiva. Y la asociación de vecinos Guzmán El Bueno, con la aquiescencia de La Casa del Fumador, ha tomado un atractivo local de la zona centro para exponer buena parte de su notable patrimonio semanasantero.
No son los únicos ejemplos de tiendas y comercios que se engalanan estos días para atraer la mirada del visitante al hilo de las fechas que corren una sábado de gloria cualquiera, como hoy.
1.800 muñecos de Playmóbil conforman la exposición que la firma matriz del bordado en la Semana Santa de la capital ha puesto en el escaparate. Amigos, caras conocidas, personajes de toda la vida y hasta ausentes que permanecen presentes a través del recuerdo lucen ante la pantalla del ayuntamiento viejo a tamaño de escala. «Y no paramos, porque cada año viene alguien más a traernos nuevas piezas con lo cual, no tenemos límites», explican desde Festones.
En Las Antillas, la Virgen del Mercado procesiona a hombros de una decena larga de paquetes de café que hacen las veces de papones figurados, con el fondo de la Plaza del Grano en una fotografía rodeada de cirios y velas y acompañada de cíngulos y trompetas. El establecimiento de Burgo Nuevo se recrea en imágenes diversas de la Pasión y ofrece el mismo efecto visual y obliga a detenerse aunque haya prisa.
Un papón enorme de Jesús Nazareno decora la cristalera de La Casa del Fumador, justo al lado de una maqueta de La Crucifixión y de un simil de El Expolio. Más allá está la Oración en el Huerto y hay una Piedad haciendo esquina. No falta la reproducción de la puerta de El Perdón correspondiente a la Colegiata de San Isidoro y todo ello complementado de forma conveniente con los carteles indicadores que explican de forma conveniente cada una de sus estampas.
Estos días se sumarán nuevos establecimientos en la capital, como lo hacen también en San Andrés del Rabanedo. Pinilla muestra desde hace ya un par de semanas en el Kiosco «Cris» un variopinto abanico de papones, libros, medallas y pasos manufacturados que llevan el ambiente de estos días al barrio. Y así en el resto de la provincia, para hacer frente a la costumbre. Como cada año.