Castro esgrime los beneficios del ganado frente a la ofensiva contra la carne

¿Son realmente las vacas el enemigo del planeta?. Este es el interrogante que ha planteado Luis Castro Robles, director de producción de NEAL S.A., de Valles del Esla, en su intervención en el III Congreso de Agroalimentación de Diario de León. 

En una interesante exposición, Castro ha planteado la desaparición de las vacas de la faz de la tierra por orden gubernamental y ha dibujado el escenario que quedaría, desmontando a su vez los argumentos que se esgrimen para denostar al ganado bovino. 

En esta distopía, el director de producción de Neal ha señalado que con la eliminación de las  vacas llegaría el abandono rural, al desaparecer el medio de vida de muchos habitantes de los pueblos; se alterarían los ecosistemas, con la proliferación de los territorios asilvestrados, y se favorecerían los grandes  incendios forestales, como ha ocurrido en los últimos años.

En consecuencia, Castro ha enumerado efectos como la degradación del suelo y la desertificación, la pérdida de productos de alto valor añadido y la desaparición de industrias -"sin vacas, no hay cecina"- y se daría una pérdida de biodiversidad y de patrimonio genético.

Castro ha desmontado aquellos perjuicios que supuestamente convierten a las vacas en "enemigos" de la humanidad al devorar nuestros recursos. Así, ha señalado que estos animales consumen agua "verde" procedente de los fenómenos atmosféricos como la lluvia o la nieve, que no es competencia directa con el ser humano. Sobre el cambio climático, ha incidido en que la fermentación digestiva del ganado que produce mucho metano, que permanece en la atmósfera 10 años, se degrada en CO2 y vuelve a ser reabsorbido por las plantas, no como el de los combustibles fósiles, según explica, que permanecen 10.000 años en la atmósfera.

Finalmente, ha incidido en que la alimentación de las vacas "no es competencia" de la de los seres humanos, pues su ciclo alimentario es muy diferente que se basa principalmente en subproductos que no forman parte de la alimentación humana.

Luis Castro también se ha referido al veganismo, como una "seña de identidad" confrontada con el consumo de carne. Ha explicado que la anatomía del ser humano está más preparada para el consumo de carne que de verduras o, al menos, que de verduras en exclusiva. "El debate no es carne frente a guisante, si no que se está originando un debate de carne frente a ultraprocesado vegetal", ha añadido, en relación con el gran negocio que suponen los alimentos ultraprocesados -también los veganos- para los grandes fondos de inversión.

Finalmente ha destacado que "la tierra es el futuro de León", en referencia al fundador de Valles del Esla, David Álvarez. Ha repasado la política de esta empresa en cuanto a generación de empleo en el medio rural, su apuesta por la sostenibilidad y por el bienestar animal.