ASX, nuevo todoterreno de Mitsubishi
Carrocería de cinco puertas, bajo consumo y alto equipamiento
En clave de SUV. Heredero por vía directa del Outlander y Lancer, Mitsubishi inscribe su nuevo ASX en el segmento SUV todocamino , con estética todoterreno y filosofía deportiva.
Con evidente impacto visual y versiones de tracción delantera e integral (que no permanente) 4WD, el nuevo ASX tiene un par de acreditados enemigos naturales , el Qashqai de Nissan y el iX35 de Hyundai, aunque tampoco le van a la zaga modelos como el Kuga (Ford) o el Tiguan (WV).
Con estos planteamientos, y la mayoría de las piezas provenientes del Outlander, el ASX se perfila como un auténtico polivalente capaz de satisfacer las necesidades de quien pretenda un vehículo moderno y con aplicaciones tan interesantes como el estreno de una mecánica diésel de desarrollo propio, el 1.8 DI-D de 150 CV (rampa común y turbo de geometría variable) que, progresivamente y en sustitución del 2.0 de origen WV, también equipará las gamas y Lancer y Outlander, unido a una caja manual de 6 marchas. Una mecánica que se beneficia de las llamadas «tecnologías limpias»: sistema de arranque-parada automático, alternador de recarga inteligente y neumáticos de baja resistencia a la rodadura.
Así, el ASX homologa unos contenidos consumos (entre 5,5 y 5,7 litros de media) y emisiones (145 g/km de CO 2 ).
El interior tiene buena habitabilidad y resulta confortable -”también en las plazas traseras-” y con buenos acabados, mientras las versiones de tracción total incorporan un techo panorámico acristalado con iluminación ambiental por leds .
Prueba del amplio equipamiento de serie que ofrece Mitsubishi en el nuevo ASX, es que desde la versión de acceso (Motion) se cuenta con siete airbag, climatizador, volante de cuero, ayuda al arranque en pendiente, sensores de luces y lluvia, faros delanteros de xenón, sensores traseros de estacionamiento y conexiones multimedia. El superior acabado Kaiteki añade tapicería de cuero y asientos calefactados (reglaje eléctrico el del conductor), arranque por botón, navegador y un sofisticado sistema de audio.
Apuntar, en el plano puramente comercial, que el segmento SUV incrementó en un 70% su incidencia -”según mercados y tamaños-” entre el 2005 y el 2009. Las previsiones, de aquí al 2015, apuntan hacía una subida del 60% en los mercados mundiales.
En suma, que el ASX se declina en una suerte de teoría de la evolución en clave de SUV que tampoco prescinde de una evidente deportividad en su comportamiento dinámico y aspecto estético.