La creatividad se hace protagonista

Trabajar con respeto y alegría. Esa es la máxima de Casa Peseta, una «tienda-taller-milcosasmás» en el centro de Madrid que regenta Laura Martínez del Pozo. Aunque nacida en Madrid, sus padres son de León —de Veguellina de Fondo y de Villagarcía de la Vega—y aquí nació y vive buena parte de su familia. «Prácticamente toda es de la zona de Veguellina de Órbigo», explica.

Aquí pasó todos los veranos de su infancia y regresa con frecuencia desde hace años con su hijo Tirso, «que es un nombre muy de León», según explica ella misma. «Me apetece más ir, quiero que respire aire puro ahora que es pequeño y que esté con la familia, que ande en bicicleta suelto todo el día, como fueron mis veranos, los que no cambio por nada del mundo», asegura Laura Martínez. Ella es el alma de Peseta, una marca de bolsos originales y productos textiles hechos con telas del mundo. Su tienda, Casa Peseta, está en la calle Noviciado, en uno de los barrios con más solera de Madrid y no deja indiferente a casi nadie. Telas de estampados diversos y, sobre todo mucha creatividad, llenan cada uno de los rincones de este local, que surgió de una iniciativa de la que forman parte siete personas de cuatro países distintos.

Todos ellos tienen dos rasgos en común: ponerle ganas a las cosas y tener curiosidad respecto al mundo. Esos son los requisitos que debe reunir quienes forman parte de esta proyección del mundo de Laura Martínez, que comenzó en el 2006 haciendo series muy limitadas de carteras y bolsos. Poco a poco fueron llegando las telas, los pedidos y los viajes y Casa Peseta fue creciendo hasta lo que es hoy, un lugar de referencia para creadores y ‘crafters’ (gente que hace cosas a mano).

Aquí, Laura y su equipo hacen muchas cosas ‘sin sentido’. «Siempre digo que, sea cual sea el problema, hay que sacar 30 segundos para reírse. Debajo de esta alegría, intentamos hacer algo responsable socialmente». Sin embargo, su seriedad y buen hacer les ha llevado a tener clientes como la Berlinale o Marc Jacobs, que confían en Peseta desde hace años.

Los primeros pasos

Todo comenzó cuando Laura Martínez estudiaba la carrera. «Hacía unos cómics muy tontos con un personaje protagonista que era una especie de mi ‘alter ego’ y al que puse el nombre de Peseta. Empecé a bordar la gráfica en las carteritas y cosas que hacía para mis amigos. Si me llegan a contar dónde estoy ahora no me lo hubiese creído», relata esta madrileña criada en Gijón. Quizás de allí, de las coloridas casetas de las playas asturianas que siempre le encantaron venga su pasión por las telas con las que ahora trabaja. «En realidad no lo sé, el amor es una cosa irracional», explica. Amor por las cosas creativas, hechas con mimo y poniendo su toque personal. Y es que la creatividad va haciéndose un hueco cada vez más grande y sustenta muchos de los nuevos proyectos empresariales. «Claramente, las cosas hechas a mano y de forma artesanal tienen ahora más aceptación que antes. La gente cada vez lo valora más». Laura lo tiene claro. «Estamos empezando a estar hartos de comprar a lo tonto y de formar parte de una máquina absurda en la que, finalmente, los que salimos perdiendo somos nosotros porque nos quedamos sin trabajo, cierran los comercios de nuestros barrios y encima nos quejamos mientras compramos tres pantalones a precio ridículo cada temporada».

Laura es una de las emprendedoras que apuesta por ofrecer algo más auténtico que lo producido en serie y está convencida de que las cosas se pueden cambiar. «Esta máquina está explotando y nos estamos dando cuenta de que tenemos mucho más poder del que creemos», sentencia.

Por eso el perfil del cliente de Casa Peseta, aunque variado, corresponde a personas «con un nivel cultural alto, que les gusta la moda y el diseño, pero también la música, la literatura o el cine, gente que busca algo distinto, original, de autor y que valora que esté producido de manera responsable».

Sus ‘pesetas’ —como llama a sus creaciones— se venden también en la tienda on-line de la marca ( www.peseta.org ), desde donde hacen envíos a todas partes del mundo. En España, tienen una veintena de puntos de venta, entre los que se encuentra la tienda del Museo Reina Sofía.

Casi la mitad de su facturación proviene de fuera de España, por eso Laura Martínez cree que un negocio como el suyo lo tendría difícil en León, aunque los talleres de costura que imparten en Peseta y los materiales que ofrecen a su diverso público si podrían hacerse un hueco en la provincia.

Todo forma parte de una frase que está muy de moda. ‘Do it yourself’ o ‘Hazlo tu mismo’. una filosofía que pretende sustituir la producción en masa por un concepto mucho más cuidado en el que tú mismo puedes ser el protagonista. Es tiempo de crear.