Cantabria
Siete playas a las que poder ir con mascotas ofrece la costa de Cantabria. Estas son las posibilidades:
LA MAZA: también conocida como playa de los vagos, es una pequeña playa que está situada en San Vicente de la Barquera en la Ría de Oyambre. Con aguas tranquilas y una fina arena de color dorado, es una de las últimas playas que se han habilitado para perros en Cantabria. Perfecta para disfrutar de la paz y el buen tiempo con la compañía de tu fiel amigo.
LA RIBERUCA: es una de las playas caninas más criticadas de Cantabria. Esto se debe a que se encuentra en la desembocadura del río Saja en Sauces. Lo que provoca que, cuando la marea está baja, se convierta en un barrizal.
Sin embargo, hay en ocasiones que es un paraje perfecto para pasar el rato (prácticamente a solas) en las aguas con poco oleaje de esta playa de pequeño tamaño. Siempre que quieras con la compañía de tu perro.
ARCISERO: localizada al este de la población de Castro Urdiales se encuentra esta hermosa playa de roca y arena. Su rasgo más significativo es que se encuentra encallada en un valle entre Cerrecedo y Peña Helguera. Lo que le da un aspecto muy distinto de otras playas. Presenta un oleaje moderado o alto, por lo que hay que tener algo de cuidado con nuestras mascotas. También por las rocas del suelo que se pueden clavar en sus almohadillas, más aún si las tienen sensibles.
CALA CARGADERO MIOÑO: esta pequeña cala también se encuentra en la zona de Castro Urdiales. Está habilitada para perros durante todo el año sin horario restrictivo. Tiene poco oleaje y está formada por grava y piedras. Perfecta para un día de desconexión viendo cómo disfruta tu mascota en este paraje natural.
EL PUNTAL: ubicada en Somo, conforma un tramo de la playa del Puntal, que cierra por el sur la entrada a la bahía de Santander. La parte de esta inmensa playa que permite la entrada de perros es la del sur, junto al muelle de Somo en el Estuario del Miera. En este caso la particularidad que te encontrarás es que esta playa está formada por una especie de dunas, sobre todo en la parte central. Como curiosidad, en alguna de estas dunas hay tendencia a practicar nudismo.
ARENAL DEL JORTÍN: se trata de una pequeña cala situada al lado de la playa de San Juan de la Canal, en Soto de la Marina. La corta extensión de su fina arena se ve acompañada de los acantilados y rocas en las que se encuentra. Debido a esto el oleaje es bastante más atenuado que en otras de las playas cántabras ya desarrolladas. Esta playa canina es relativamente nueva, ya que fue en 2016 cuando el ayuntamiento de Soto de la Marina permitió la entrada de perros con sus dueños dentro de este terreno.
PLAYA DE HELGUERAS: zona habilitada para bañistas con perros desde 2018. Está ubicada en la comarca de Noja, en el último tramo de la playa de la que recibe el nombre (Helgueras). Más concretamente desde la última torre de salvamento hasta el inicio del Monte Brusco. Presenta una arena sutil y rocas afiladas de gran tamaño, lo que hace que reciba un aspecto de lo más llamativo. Para llegar al acceso del tramo que permite la entrada de perros en la playa hay que caminar en torno a cinco minutos. A pesar de ello, siempre debes asegurarte de que lo haces desde aquella última torre que indica la zona canina habilitada.
Además y muy importante, en esta playa NO se puede soltar a los perros.