«Hay que redefinir el papel de León en la comunidad, pero sin literatura»

|||| El Partido Socialista de León tiene, según su secretario general, Miguel Martínez, «una cosa clara»: «Su postura en los últimos años -dice- es la de redefinir el papel de León dentro de la comunidad autónoma, pero siempre con respeto a la Constitución y al estatuto de autonomía». Para ello, a juicio de este berciano, alcalde de la localidad de San Andrés del Rabanedo, habría que debatir y buscar la necesaria fórmula jurídica que permitiese a León «adquirir más protagonismo». Miguel Martínez recuerda que ya el estatuto «recoge los dos territorios fundacionales de la autonomía, esas dos regiones diferenciadas que corresponden a los reinos de Castilla y de León». Por ello, el PSOE apuesta precisamente por «dar forma», por «hacer real» «lo que el estatuto dice». Así, de acuerdo con este argumento, si la región leonesa es uno de esos dos territorios fundacionales, a ella debería correspondería un mayor peso político que el que ahora tiene, y buena parte de la actual comunidad autónoma (o por lo menos la mitad) tendría que pivotar sobre ella. «Recoger» y «reflejar» ese papel sería el objetivo de una futura concreción estatutaria a la cual se llegaría tras un debate político y jurídico que aún está por llegar. Por lo pronto, el PSOE de Castilla y León ya aprobó (de forma bastante tibia) una enmienda presentada a petición de la agrupación leonesa por la cual se reconocía la «pluralidad» de identidades que existen en la comunidad. De todas formas, el secretario general de los socialistas cisastures ha hecho hincapié en que la posible reforma estatutaria contemple la peculiaridad leonesa «pero sin literatura», «que León llegue a adquirir realmente esa importancia, ese protagonismo». «El estauto -continúa Martínez- debe contener referencias exclusivas a León», para «resaltar su importancia histórica, sus peculiaridades y sus diferencias». En cuanto al tema de la identidad, el alcalde de San Andrés asegura que dentro de la autonomía existe «una pluralidad de identidades». «Ésta es una comunidad muy plural, sin duda alguna»; destacando el caso de León, «que tiene una identidad propia, al margen de la autonomía». Y continúa: «Si se quiere crear en Castilla y León un sentimiento regional, si se quiere que los ciudadanos se sientan identificados con esta comunidad, hay que empezar por reconocer y resaltar la identidad y la pluralidad de las provincias que la componen». Ese sentimiento «plural» al que se refiere Martínez debería estar, a su parecer, «recogido estatutariamente». A este respecto, también denuncia con firmeza que el Partido Popular, con el «centralismo» que propugna, «se lleva equivocando desde hace ya más de veinte años». Por otra parte, respecto a una singular propuesta lanzada hace algunos meses por un histórico del PSOE leonés, Agustín Turiel, de crear una «diputación regional», que, en gran parte, asumiese las competencias de la Junta en la provincia y se configurase como una institución intermedia entre la entidad provincial y el gobierno autonómico, Martínez no se quiso pronunciar por cuanto que, si bien la «filosofía general» del socialismo leonés con respecto a autonomía es esa, aún no están claras las formas de materializarla en la realidad. La idea no es en absoluto nueva, no sólo fue lanzada en pleno debate autonómico como fórmula para integrar con cierta justicia histórica a León en Castilla; sino incluso a finales del siglo XIX y principios del XX, firmado por las plumas de diversas personalidades leonesas que constituyeron sin duda un temprano precedente de la petición de autonomía por parte de las regiones españolas. Partidos como UPL rechazaron el proyecto por considerarlo «electoralista», y lo cierto es que no se ha vuelto a oír nada nuevo sobre el tema.