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Los animales de compañía también sufren alergias TÚ Y TU MEJOR AMIGO BUSCANDO UN HOGAR...

Las reacciones alérgicas son provocadas por una gran variedad de alérgenos presentes en el ambiente o en los alimentos y pueden llegar a ser muy molestas para nuestras mascotas

ANA M. DIEZ

Publicado por
MÓNICA FARTO LÓPEZ veterinaria clínica veterinaria centro león
León

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La tendencia a padecer alergia es una condición heredada, por lo que normalmente los primeros síntomas suelen aparecer a partir de los seis meses, aunque también se pueden desarrollar a cualquier edad, y son el resultado de una reacción exagerada del sistema inmunitario ante la presencia de un agente extraño, el alérgeno. Con frecuencia son de carácter estacional sin embargo hay casos en los que el animal requiere tratamiento continuado durante todo el año. Algunas razas están más predispuestas como son el Bichón Frisé y Maltés, Dálmata, Caniche, Carlino, West Highland White Terrier, Lhasa Apso, Golden Retriever, etc. Hay una gran variedad de sustancias que pueden actuar como alérgenos y pueden encontrarse en el ambiente o en los alimentos. Dentro de los ambientales se encuentran todo tipo de pólenes, ácaros del polvo, moho etc que ingresan en el organismo una vez que son inhalados desencadenando una reacción de hipersensibilidad. Los síntomas fundamentalmente son, el prurito (picazón), que hace que el animal se lama y rasque incesantemente, la piel se inflama, apareciendo los granitos característicos a modo de sarpullido, alopecias y finalmente pueden llegar a infectarse y dar lugar a una pioderma secundaria. A veces hay conjuntivitis y problemas respiratorios. Las áreas afectadas suelen ser las axilas, ingles, zona abdominal, pabellones auriculares, espacios interdigitales, labios y mentón. Por ejemplo, en una alergia de contacto las lesiones aparecen en las partes ventrales como el pecho, abdomen, zona del escroto y mamas, y es originada por materiales sintéticos, lanas, nylon, que componen las camas donde duermen o las alfombras de casa, algunos tipos de goma, plástico, detergentes, etc que interaccionan con la piel y de inmediato producen un intenso picor. El tratamiento debe iniciarse lo antes posible porque es muy molesto para nuestra mascota y a la vez debemos eliminar el agente causal. Un animal también pueder ser alérgico a las picaduras de las pulgas, reaccionando a la pequeña cantidad de saliva que inyectan cuando muerden, en la que se ve dañada la zona dorsolumbar donde brotan pápulas, hay descamación y alopecia. El tratamiento instaurado debe incluir la desparasitación externa o de lo contrario el proceso no remitirá. Las alergias alimentarias son difíciles de diagnosticar puesto que a veces se acompañan de síntomas compatibles con multitud de enfermedades. Hay que saber diferenciar las intolerancias alimentarias de las alergias. En éstas los alérgenos son las proteínas presentes en el alimento, que no son reconocidas por el organismo y hacen que el sistema inmune reaccione. Los cereales, lácteos, carne de pollo o cordero, huevos etc lo importante es poder identificar el ingrediente en cuestión para evitarlo. Es ideal en estos casos administrar al animal un pienso hipoalergénico en el que las proteínas están hidrolizadas de modo que pasan desapercibidas para el ssistema inmune. Además estos piensos son muy digestibles e incorporan ácidos grasos muy beneficiosos para la curación de la piel. En las intolerancias es característico la presencia de vómitos, diarrea o defecaciones frecuentes y en ningún momento hay signos cutáneos. Un buen diagnóstico determinará si nuestra mascota es alérgica o no, y en el caso de que lo sea diferenciaremos si se trata de una alergia ambiental y/o alimentaria. Por último si el propietario lo requiere, una prueba aun más específica nos llevará a identificar los alérgenos que participan para incluso poder hacer tratamientos de hiposensibilización muy seguros y eficaces. Natividad adora a su perrita Luna, elegante Bichón Maltés que lleva en la familia casi cuatro años. En la foto Luna presume de su nuevo peinado recién salida de la peluquería, ya que aunque en casa intentan cepillarla siempre que pueden, es necesaria la intervención de un buen profesional para sanear el pelo, hacer algunos retoques y por supuesto colocarle su lacito rojo como toque final. Sus dueños confiesan que la tienen demasiado mimada y cuando la ven apática o triste la deleitan con un pequeño plato de comida casera que por supuesto siempre está dispuesta a devorar. Cariñosa y muy agradecida, pide sus premios a dos patitas pegando saltos sin parar hasta que acaba consiguiendo su golosina. A veces es demasiado sensible y cada vez que la regañan no pueden soportar ver su carita apenada y hasta pasado un tiempo Luna no se recupera del susto volviendo a ser alegre y juguetona. Es una raza ideal para tener en un piso y como buena perrita faldera nunca se separa de su dueña que disfruta cada día de su fiel compañía. Esta es Cari, una hembra cruce de mastín. Tiene dos años y pesa aproximadamente 35 kilos. La dejaron a la puerta de la protectora cuando era un precioso cachorrillo de dos meses. Es super cariñosa con la gente, aunque le cuesta coger confianza con quien no conoce. Con los demás perros se lleva bien, pero si alguno se pone muy impertinente Cari no duda en sacar su carácter. Es una perra muy tranquila y apacible que necesita que alguien la de la oportunidad de tener una vida feliz fuera de la protectora.