La Junta de Andalucía anuncia que paralizará el pago de las prejubilaciones a los intrusos
El Ejecutivo de Griñán se personará como acusación en la trama de los ERE fraudulentos
Los consejeros andaluces de Presidencia y Economía.
La Junta de Andalucía se personará como parte perjudicada en la supuesta trama de irregularidades en los expedientes de regulación de empleo (ERE) subvencionados con dinero público, por lo que podrá exigir «responsabilidades civiles y penales a los presuntos culpables». De confirmarse su imputación, entre éstos se encontraría el exconsejero de Empleo Antonio Fernández. El Ejecutivo regional dejará además de pagar las prejubilaciones a las personas detectadas en la investigación interna como «intrusos» y tratará de recuperar el dinero abonado.
La consejera de Presidencia y portavoz, Mar Moreno, anunció que la jueza instructora ha admitido la personación de la Junta, que es «la primera perjudicada» por las irregularidades. «Igual que hemos sido activos en la investigación y denuncia, vamos a serlo en el proceso penal», aseguró Moreno tras defender que ha sido el presidente andaluz, José Antonio Griñán, quien «ha denunciado, investigado y destapado las irregularidades que se siguen en el juzgado». Una actuación «tan clara y contundente» que, sostuvo, «debe haber pocos precedentes». Afirmó que la actuación del Gobierno andaluz que ha sido respaldada por la dirección federal del PSOE, a cuyos dirigentes explicaron la tarde del lunes el alcance de la trama.
La portavoz del Ejecutivo repitió en varias ocasiones ahora es el momento de «perseguir a los culpables y recuperar el dinero de los andaluces». En este sentido, la administración autonómica iniciará «de inmediato» un procedimiento para paralizar el pago de las prejubilaciones a aquellos que las reciben sin derecho a ello; es decir, los intrusos detectados.
Por su parte, el PP cree que en el escándalo de los ERE se ha superado el tiempo de las explicaciones y «hemos alcanzado la fase de las dimisiones», de la asunción de responsabilidades políticas. Así lo aseguró ayer la portavoz popular en el Congreso, Soraya Sáenz de Santamaría.