«El proyecto es también una apuesta social del alcalde»

El delegado del Gobierno, Miguel Alejo, combinó ayer en sus palabras el doble sentido que, a su juicio, tiene el proyecto del Palacio de Congresos, que va más allá de una infraestructura para convertirse en una apuesta «social», con algunas notas de humor que ayudaron a hacer más ameno un acto con buena sintonía entre sus protagonistas por encima de siglas.

Alejo insistió en varias ocasiones en la «visión integradora de ciudad» y el «urbanismo social» del alcalde y compañero de partido, Francisco Fernández, y en su decisión de apostar por el oeste de la ciudad. «Podía haberse hecho en otra zona, pero se decidió hacerla en ésta».

Alejo insistió en que el Palacio de Congresos dará «valor» a dos proyectos del Gobierno Central, uno ya construido -la nueva terminal del aeropuerto, criticado desde su inauguración por la falta de vuelos- y otro a punto, el tren de alta velocidad. Además destacó la colaboración institucional del proyecto. «Hacen falta alcaldes que sean acicates» para las administraciones, opinó también.

Como conclusión, Alejo dijo que los «brotes de primavera» están anunciando un nuevo tiempo de progreso para León.