La Junta suspende las ayudas para la instalación de alarmas en las iglesias por la crisis

El Obispado de León ha colocado alarmas en 32 iglesias y ermitas de la diócesis y tiene previsto ampliar la seguridad electrónica a todos sus templos, que suman más de setencientos edificios.

Sin embargo, el proyecto se encuentra paralizado por falta de fondos ya que la Junta de Castilla y León ha suspendido las ayudas para este programa y dirigidas a todas las diócesis de la Comunidad debido a la crisis, según fuentes de la Consejería de Cultura.

El delegado de Patrimonio del Obispado de León, Máximo Gómez, espera que la medida pueda reanudarse en próximas campañas. Actualmente tiene en lista de espera una docena de templos.

Durante el año 2007, la Dirección General de Patrimonio de la Junta dotó con dos millones de euros esta línea de subvenciones que cubre la instalación del sistema de seguridad y la conexión con una central de alarmas que en caso de emergencia da aviso inmediato a la Guardia Civil o al Cuerpo Nacional de Policía.

El mantenimiento del sistema tiene que ser costeado por las parroquias. Cada dispositivo supone un gasto superior a los 1.000 euros anuales, según ha podido saber este periódico. La selección de las iglesias con instalación de seguridad depende del Obispado de León. Además de asumir el coste económico del mantenimiento es imprescindible que los edificios reúnan algunos requisitos técnicos como que «tengan corriente eléctrica».

«No podemos asumir el coste de una alarma», asevera el párroco de Arenillas de Valderaduey, Gaspar Turienzo. La parroquia, de escasos habitantes, tiene «un presupuesto anual de 200 euros y sobrevive gracias a que de vez en cuando alguien paga la luz», señala.

Roban la misma pieza dos veces. Sin embargo, el pueblo rechaza dejar en depósito en el Museo Diocesano de León su patrimonio sacro. La iglesia de este pueblo ha sido objeto de robos en tres ocasiones y en dos de ellas se han llevado la misma pieza, una talla que representa el nacimiento de San Juan de Sahagún que había sido recuperada y restaurada de un robo anterior.

La parroquia perdió en 1985 un cáliz, la patena, relieves de madera policromada y cadelabros; en el 2005 el bajorrelieve del nacimiento de San Juan de Sahagún, la talla de San Francisco, una cruz y un incensario. La talla fue localizada en un monte de Zamora. Se cree que los ladrones la dejaron allí al ver un control policial. Devuelta a la iglesia del pueblo, en el 2008 la robaron por segunda vez. Había sido restaurada.