Cuarentena sobre dos ruedas para el Eneicat RBH Global

La carretera es su hábitat. Y salvo excepciones, el escenario en el que desde hace un mes ha quedado vedado por la pandemia del coronavirus. Son las doce integrantes de la escuadra leonesa Eneicat RBH Global dirigida por Eneritz Iturriaga y Humberto Gómez para las que la cuarentena ha frenado sus retos para este año. Y también las ha obligad a hacer de su casa, salvo alguna excepción, el único lugar de trabajo y entrenamiento. Eso sí, con la bicicleta como compañera inseparable. Con Eneritz y Humberto supervisando su trabajo diario a la espera de la que competición retome posiblemente en julio toda su intensidad y con el ‘movistar’ Patxi Vila diseñando el libro de ruta en estas semanas de puesta a punto, para las ciclistas del Eneicat RBH Global la crisis provocada por el coronavirus las ha hecho cambiar radicalmente su quehacer. En el caso de las españolas María Brizuela, Eukene Larrarte, Ziortza Isasi, Paula Soler, Sofía Martínez confinadas en sus casas y haciendo del tradicional rodillo su mejor aliado. «Me suelen mandar tres días hacer rodillo, por la tarde gimnasio y también series para mantener la forma», precisa la leonesa Brizuela Para su compañera Ziortza el «tener la cabeza ocupada también es esencial. Sin olvidarse del trabajo diario». Paula Soler trata también de sobrellevar las cuatro semanas de encierro. «Aunque no es nada fácil». También en casa tienen que afrontar estas semanas la mexicana María Paula Tobías. «En mi país no existen tantas restricciones aunque por sentido común yo entreno en casa». En Rusia está el contrapunto entre dos ciclistas. Una, Anna Baidak que puede ejercitarse al aire libre y otra, Anastasia Pliaskina, que debe hacerlo en casa. La japonesa Mayuko y la griega Bárbara Fasoi también pueden salir a la calle a entrenar. No es el caso de la letona Lija Laizane ni de la italiana Alessia Bulleri.