Diario de León

La esposa de Sánchez lo confirmó por error an entregar unos correos

El juez cita a la directora de la Moncloa que trabaja para Begoña Gómez

Begoña Gómez en la comisión de investigación del PP. Javier Lizón

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Melchor Sáiz-Pardo/ Mateo Balín
Madrid

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El juez Juan Carlos Peinado ha citado a declarar el 20 de diciembre, por el momento solo como testigo, a María Cristina Álvarez Rodríguez, la alto cargo de Moncloa que en realidad, según los correos aportados a la causa, se ocupaba de gestionar el día a día de la Cátedra Extraordinaria de Transformación Social Competitiva (TSC) que dirigía la mujer de Pedro Sánchez en la Universidad Complutense de Madrid (UCM). Se da la circunstancia de que Álvarez también ha sido convocada este viernes 29 por la mañana a declarar ante la comisión de investigación del caso ‘Ábalos-Koldo’ en el Senado.

La decisión de citar a esta asesora se produce solo horas después de que las acusaciones en esta causa contra Gómez pidieran su declaración como imputada para que la directora de Programas de la Secretaría General de Presidencia aclare, entre otras cuestiones, en qué consistían esos trabajos que hacía como asistente personal de la esposa del jefe del Ejecutivo o «quién le encomendó esas labores» que desarrolló «al menos entre 2021 y 2024».

La citación de Álvarez se produce después de que el pasado lunes la defensa de Gómez aportara varios mails para intentar exculpar a su cliente de la acusación de apropiación indebida pero que, en realidad, certificaban que la directora trabajaba como asistente personal suya en la Complutense y que era esta alta funcionaria la que, a pesar de estar pagada con dinero público y ocupar un cargo público, se ocupaba del día a día de la cátedra.

El nombre de esta asesora de Moncloa, que entró en Presidencia el 16 de julio de 2018 a los pocos días de la llegada de Sánchez al poder, saltó a los medios al conocerse el contenido de otros mails adjuntados a la causa contra Gómez por tráfico de influencias, corrupción y, desde hace unas semanas, también por apropiación indebida e intrusismo profesional. En esos mails, en consonancia con los remitidos ahora al juez por la propia imputada, se evidenciaba que Gómez usó a Álvarez para ocuparse de gestiones de la cátedra. Incluso, que se ocupaba de intentar amarrar los patrocinios externos.

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