La letra da la razón al PSOE, pero el PP se agarra al espíritu

1. ¿De quién fue la iniciativa del pacto antiterrorista? Poco más de tres meses después de ser elegido líder del PSOE, Zapatero propuso al Gobierno firmar un pacto para luchar más eficazmente contra ETA. El entonces vicepresidente del Gobierno, Mariano Rajoy, dijo que la iniciativa era como «sacar un conejo de la chistera» para llamar la atención. El Acuerdo por las libertades y contra el terrorismo se firmó el 8 de diciembre del 2000. 2. ¿Ha utilizado electoralmente el PP el terrorismo? El texto del acuerdo establece expresamente la voluntad de «eliminar de la legítima confrontación política o electoral las políticas para acabar con el terrorismo». Es claro que tanto Rajoy como Aznar están usando la tregua en Cataluña para desacreditar a su adversario y cobrar ventaja de cara al 14-M. Han sido mucho más duros con Zapatero que con el propio comunicado de ETA. 3. ¿Prohíbe el acuerdo aliarse con un partido cuyo líder habla y, según algunos, pacta con la cúpula de ETA? Como es lógico, no contempla este caso. Pero en el preámbulo se criticaba al PNV y EA por «poner un precio político al abandono de la violencia» que «consistía en la imposición de la autodeterminación». También negaba cualquier posibilidad de pactar con ambos partidos mientras no rompieran con Batasuna. Pactar una tregua con la cúpula etarra sería, siguiendo esa lógica, tan rechazable como lo que hicieron el PNV y EA al firmar el Pacto de Estella con ETA y Batasuna. 4. ¿Ha incumplido el PSOE el acuerdo? Según el texto, no. Sin embargo, de su espíritu se desprende que coaligarse con alguien que hubiera negociado con la banda terrorista sería en cierta forma traicionarlo. Pero Carod y ERC niegan haberlo hecho, han rechazado el comunicado etarra y además el primero ya no está en el tripartito.